Vega Almohalla, Premio Joven Talento de Educación en Valores

D. Casillas
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La cantante y compositora abulense recogió el premio en el Parlamento de Andalucía, donde animó a los jóvenes a que luchen por lograr sus objetivos, a veces con la música como aliada

Vega Almohalla, Premio Joven Talento de Educación en Valores - Foto: ALFREDO DE ANCA

La cantante y compositora abulense Vega Almohalla, que se dio a conocer al gran público al incluir Netflix en su serie Élite su canción En el aire, ha sido galardonada recientemente con el Premio Joven Talento en las XXII Jornadas de Educación en Valores –centradas en los valores del deporte, la música y el voluntariado, organizadas por la Escuela Cultura de Paz–, galardones que fueron entregados en la sede del Parlamento de Andalucía, en reconocimiento a «su valentía para innovar, por el amor a su tierra y a su país y por la importancia que supone en su vida el conocimiento interior para mostrarse a los demás».

Feliz por este reconocimiento, que significa un 'suma y sigue' en una trayectoria muy exitosa, comentó Vega Almohalla, con modestia, que «creo que me han dado este premio porque caí bien a la ONG Escuela Cultura de Paz y pensaron que lo merecía... en serio, creo que con él han querido reconocer mi labor como creadora musical y también a mi implicación con los jóvenes, por animarles a que se dediquen a lo que ellos quieran».

Esa idea de animar a los jóvenes, añadió, «es también algo que cuento en mis canciones, igual que les hablo de otros valores en general como no rendirse, confiar o tener fe, siempre en positivo, desde el optimismo».

Además, añadió, «considero que la música es un buen camino para implicar a los jóvenes en esos valores, que tanto escuchar música como intentar dedicarse a ello puede ayudar mucha gente a superar problemas como no encontrar una salida laboral o no saber a qué quieres dedicarte; es un poco difícil este mundo y a lo mejor no siempre tienes todo el apoyo que necesitas, pero la música siempre ayuda a todo el mundo, a las almas y a los corazones».

Tras recoger el premio, Vega Almohalla pronunció un discurso breve pero muy bien hilado, maduro en su argumentación y desarrolló, en el que, tras agradecer el honor del premio animaba a los jóvenes «a que no se rindan, porque el camino de la vida es duro pero al final todo se consigue y encontrarán alguien que les ayudará a seguir adelante».

Comenzó la cantante 'presumiendo' de su tierra al afirmar que «vengo de Ávila, una preciosa ciudad amurallada que si tenéis oportunidad no podéis dejar de visitar», para añadir que «soy una persona sencilla, como tantas otras en el mundo, llena de ilusiones, de sueños, de proyectos, con muchas metas por delante por conseguir, agradecida a la vida porque me ha abierto el camino y las puertas de forma inesperada» y así «he ido entrando en este mundo del arte que me hace tan feliz. Mi entusiasmo por la música y mi empeño por dedicarme a esto me llevó a estudiar profesionalmente en este ámbito, y el destino, el esfuerzo y la constancia me han ido llevando a este punto en el que no sé muy bien dónde me encuentro en el mundo artístico, pero lo importante es cómo me siento: soy cantante, me siento artista, ilusionada y feliz con lo que hago».

sentirse bien. En cualquier caso, siguió, «creo que lo importante es sentirse bien con uno mismo, aceptarse, quererse, y así poder dar y transmitir a los demás todo lo que llevamos dentro». Contó a quienes le escuchaban que «acabo de sacar mi primer disco, primera meta conseguida, con unos temas que van haciendo referencia a diferentes momentos en la vida de una persona. En el primer tema, Acuna, intento transmitir la importancia de no olvidar nuestras raíces, a quien nos ha dado la vida, nos ha cuidado y protegido; después, el resto va señalando diferentes momentos de la vida, buenos y malos».

En otro de los temas, titulado Los fieles, continuó su discurso, «hago referencia a esas personas incondicionales que siempre están contigo, que no te fallan, o esas que en algún momento de tu vida han sido tu estrella; es complicado enfrentarse a un mundo lleno de intereses, de personas que solo miran por sí mismas y pisan a cualquiera, incluso teniéndoles por amigos, pero yo creo en esa estrella que nos va iluminando el camino en los momentos difíciles; siempre aparece la persona adecuada que te ofrece su ayuda en esa situación difícil y te saca de lo que parecía que no tenía solución. Yo os quiero decir a los jóvenes que la vida no es fácil, pero que hay que enfrentarse a ella con valentía y con confianza. Hay veces que lo vemos todo negro, pero tenemos demasiados colores alrededor como para solamente fijarnos  en ese. Mi lema es pedir, luchar, confiar, hay veces que la vida es como un desierto seco, duro y costoso, pero con nuestro empeño y esfuerzo, y la certeza de que no estamos solos, podemos conseguir cruzar ese desierto y conseguir todo lo que nos propongamos».

Antes de cerrar su pequeño discurso de agradecimiento, que remató con el regalo de la interpretación sin acompañamiento instrumental ninguno de un trozo de una de las canciones de su primer disco (en donde demostró el poder y la calidad de su voz), defendió Vega Almohalla que «hay que luchar contra viento y marea en este mundo en el que nos ha tocado vivir, y aunque a veces se pierda el ánimo, algo o alguien nos hará impulsarnos para seguir con ilusión».