Hablar de Mary Quant es hablar de la prenda que escandalizó a los puritanos y que conquistó a la mujer. Ahora, cuando la diseñadora cumple 85 años, la minifalda vive una eterna juventud.
Corrían los años 60, época de optimismo y agitación social. La calle demandaba cambios y la mujer sentía la necesidad de deshacerse de ataduras, motivo por el que la modista metió la tijera y acortó 15 centímetros la falda, convirtiéndola en bandera de la liberación femenina.
«La minifalda no surgió de una manera concienzuda: fue una explosión, una necesidad, la juventud lo pedía a gritos», declaró públicamente Quant, quien utilizó una margarita como símbolo de la revolución juvenil.
Este corte atrevido y también transgresor revolucionó la moda y se convirtió en una herramienta de empoderamiento para la mujer en una época en la que era impensable que mostrara sus rodillas.