A Eduardo Benito la dedicación al negocio de las carnicerías le viene de familia. De hecho tanto su abuela como su padre, sus tíos y sus hermanos han sido carniceros de profesión y fue precisamente con su progenitor con quien desde muy pequeño comenzó a trabajar en el puesto del Mercado Municipal de bastos que a día de hoy regenta.
¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila?
Soy muy de mi tierra y me da pena porque siento que se muere la ciudad. Muchas veces pienso que mis hijos se van a tener que marchar a trabajar fuera y eso me da mucha pena.
¿Qué es lo que más le gusta de Ávila?
La gente. Todo el mundo dice que somos muy cerrados, pero la gente de Ávila es maravillosa.
¿Y lo que menos?
Las críticas que nos hacen y a veces el frío.
Un lugar de la ciudad para perderse.
Me gusta mucho el centro. Será porque estudié y trabajo en el centro, pero sobre todo me gusta de madrugada la plaza de la Catedral y las calles Reyes Católicos y Alemania… es una zona que me encanta.
Un recuerdo de su infancia.
Tirarme con un plástico por la nieve como si fuera un trineo en la falda del lienzo norte de la Muralla.
Un personaje abulense que le haya marcado.
Tomás Luis de Victoria. En su día lo estudié y me gustó.
El mayor cambio que necesita Ávila es…
Que dinamicen un poco la ciudad… que no seamos otro Teruel u otra Soria. Ávila también existe y está muy cerca de Madrid, pero parece que está en una isla perdida.
Y tiene que mantener...
Su gente. Somos maravillosos.
¿Qué le parece la ciudad hoy en día?
Me parece que se va apagando porque vamos perdiendo industria, turismo… somos los grandes olvidados. Que se acuerden de nosotros, que tenemos una ciudad maravillosa, con capacidad para acoger industria y turismo.
¿Cómo ve la ciudad en el futuro?
Que parte de mis sueños se hacen realidad y Ávila no pasa a ser un sitio para ver la Muralla y cuatro cosas más, comer el chuletón o incluso un dormitorio de Madrid. Espero que sea una ciudad viva, con niños pequeños.
¿Qué puede aportar a la ciudad?
Mediante la venta de carne fuera hago que la gente sepa que hay un sitio en España donde se hacen las cosas bien y que somos amables. Ávila puede ofrecer muchas cosas y al que viene le gusta.
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