SANDRA García (Ávila, 1994) comparte hoy protagonismo con Choco y Canela, una tímida pareja de perritos en cuyos ojos se adivina un pasado demasiado triste para dos animalillos como ellos. Para que eso no pase, para que ningún animal tenga que pasar por el sufrimiento, el maltrato y el abandono, Sandra inició hace dos años Animales en Apuros, una asociación sin ánimo de lucro cuyo único objetivo es, dice, «intentar ayudar a cualquier animal que lo necesite, siempre dentro de nuestras posibilidades».
Su juventud no ha sido nunca un impedimento a la hora de poner en marcha un proyecto que ya puede presumir de cifras importantes: en sus dos primeros años de vida, Animales en Apuros ?ha rescatado cientos de animales de las calles y campos de Ávila. «Hemos rescatado y dado en adopción a unos 200 animales, sobre todo perros», aporta este primer dato Sandra que recuerda para Diario de Ávila el origen de una asociación que además de los socios y colaboradores activos cuenta también con una treintena de casas de acogida.
¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila?
La naturaleza, sobre todo la que la rodea.
¿Qué es lo que más le gusta de Ávila?
La tranquilidad que hay para el día a día y que tienes muy cerca todo.
¿Y lo que menos?
La ideología de mucha gente. Su pensamiento es un poco cerrado.
Un lugar para perderse.
En la provincia, Gredos, y en la ciudad, los Cuatro Postes.
Un recuerdo de la infancia
Mis mayores recuerdos de la infancia están en el pueblo de mi madre,Chamartín, porque pasábamos allí muchos veranos. Pero también recuerdo ir a ver la cabalgata de los Reyes.
Un personaje abulense que le haya marcado.
Mi padre, Vicente García.
El mayor cambio que necesita Ávila es …
Abrir la mente a todo lo nuevo. Por ejemplo al veganismo, que no se conoce. Y mucha gente hasta te critica por serlo, piensa que eres tonta. Pero yo no me meto con nadie. Yo te respeto a ti, pues respétame tú a mí.
Y tiene que mantener…
La unión que tiene la gente.
¿Qué le parece la ciudad hoy día?
Creo que podría progresar un poco más, por ejemplo en el tema comercio. Yo trato siempre de comprar en Ávila y en las tiendas pequeñas, en el barrio.
¿Cómo ve Ávila en el futuro?
La veo mejor de lo que está. Soy optimista.
¿Qué puede aportar a la ciudad?
Desde mi trabajo en Animales en Apuros, intentar concienciar un poco más a la gente sobre los animales, haciéndoles ver que son seres conscientes y que sienten, y que hay que tratarles bien y respetando sus derechos.