Nissan, ladrillo y hostelería notan los efectos de la huelga

M.E,
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Fecopa reconoce escasez de algunos materiales, Nissan habla de retrasos y en restaurantes y bares se empieza a ver de cerca el problema. El ladrillo y la hostelería avisan del alza de precios

Nissan, ladrillo y hostelería notan los efectos de la huelga - Foto: Óscar Solorzano

Los supermercados están siendo una de las caras más visibles de un cierto desabastecimiento por los efectos de una huelga del transporte que supera los diez días de duración, pero hay otros muchos sectores afectados. La construcción y la hostelería reconocen que ya notan las consecuencias del paro de los transportistas, los primeros con la escasez de algunos materiales, como hormigón o cemento, y los segundos con la amenaza de no poder contar con algunos productos en un corto plazo, como la cerveza, la harina, la leche o el aceite de girasol. Además, los representantes de las federaciones abulenses también advierten de la escalada de precios que vienen registrando en su actividad en los últimos meses por el encarecimiento de la energía y las materias primas, lo que provoca presupuestos al alza y muy acotados en el tiempo, en el caso del ladrillo, y la «reducción de márgenes» y una subida de precios para el cliente final que parece inevitable en la hostelería, aunque se asegura que no será tanta como la que asumirá el sector.

En la industria también se sienten los efectos de la huelga. Según recogió Ical, Nissan advirtió ayer de que aunque «no hay un riesgo de bloqueo de las operaciones industriales aún» por la huelga de transportes, determinados materiales «llegan con retraso» a su planta de Ávila. De esta manera, las protestas «sí están teniendo incidencia» en su industria y advirtieron que «de continuar así, obviamente, aumentará la misma poniendo en riesgo las operaciones industriales de la planta», señalaron las fuentes consultadas por Ical. 

El presidente de Fecopa, Ladislao García Segovia, señala que el paro sí está frenando la llegada de algunos suministros, como los de hormigón, arena y cemento, lo que puede estar afectando y ralentizando algunas obras. «De momento se está tirando de las existencias de los almacenes de donde nos suministramos los constructores abulenses», apunta García Segovia, quien añade que ahora no hay algunos materiales que «hace dos ó tres días sí había y que ahora no sabemos cuándo van a volver». Yes que el problema «nos afecta en una doble vertiente», por un lado que el material «pueda llegar a las plantas» y después que «nos llegue hasta las obras». 

En el sector también advierten de la subida del precio de los materiales que «no es de ahora, es del año pasado», y que se achaca al encarecimiento de la electricidad y los carburantes. Esto está provocando que «los presupuestos al cliente tengan un plazo muy corto, a quince días o un mes, porque los precios de los proveedores tampoco los pueden mantener mucho tiempo».  

hostelería al límite. También la hostelería está acusando el aumento del coste de la electricidad y los carburantes. El presidente de la Federación de Hostelería de CEOE Ávila, Fernando Alfayate, explica que llevan meses acusando la subida de la factura eléctrica, lo que, sumado al incremento del precio en las materias primas, está poniendo en jaque al sector, que ya se plantea movilizaciones. Productos frescos como el pescado, la carne o los huevos están al alza, algo que creen se acabará notando (si no lo ha hecho ya) en la cuenta. «Se está tratando de no repercutir toda la subida, pero no todos podrán hacerlo. Los márgenes se reducen pero si nos quedamos sin margen no habrá más remedio».

En estos días también comienzan a notar el paro del transporte, con la consiguiente preocupación. «Todavía tenemos de todo, pero empezamos a ver que puede faltar cerveza, leche o aceite. Algunos hemos comprado mucho, más de lo que nos hacía falta, pero si esto sigue así pronto puede llegar a haber problemas», reconoce.