Miembros de la Policía Nacional y Local de Ávila informaron ayer de primera mano a los vecinos de la Zona Norte El Seminario sobre las actuaciones que han realizado en los últimos meses para controlar el 'botellón', las concentraciones multitudinarias o las molestias producidas sobre todo en el Parque de San Antonio y en las inmediaciones de la Plaza de San Francisco. Dos horas de reunión, celebrada en el Centro Socio-Cultural Vicente Ferrer, al que acudieron más de una treintena de vecinos.
Responsables de la Policía Nacional, representada por el inspector jefe de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana y el subinspector responsable de Participación Ciudadana, y de la Policía Local, representada por el segundo y tercer jefe, inspectores de este Cuerpo Policial y acompañados por el primer teniente de alcalde, José Ramón Budiño, explicaron a los vecinos de la Zona Norte el trabajo realizado en los últimos meses en la zona.
En esta reunión se informó a todos los asistentes del resultado de las diversas reuniones mantenidas con representantes de la Asociación de Vecinos de la Zona Norte El Seminario en el Ayuntamiento de Ávila y en la Subdelegación de Gobierno como consecuencia de las numerosas quejas ciudadanas que se habían planteado este verano en esta asociación por molestias en diversas áreas de la ciudad (sobre todo en las zonas aledaños a San Francisco y en el Parque de San Antonio), donde se celebraron numerosas concentraciones de jóvenes los fines de semana y festivos para consumir bebidas, generar molestias por ruidos y suciedad en su entorno y que fueron acogidas favorablemente por los responsables de seguridad lo que permitió apreciar su disminución con posterioridad.
Por parte de los responsables de la Policía Nacional se trasladó a los asistentes que la labor de tranquilidad ciudadana nos incumbe a todos y que para su control e inspección existe desde hace tiempo una labor coordinada y estructurada de actuación junto con la Policía Local tendente controlar estas concentraciones conocidas como 'botellón'. Se insistió en que estas concentraciones no son únicas en la ciudad y que su total erradicación resulta muy complicada por lo que la actuación operativa está centrada en la prevención, detección y desalojo controlado en coordinación con la Policía Local, siempre que la intervención no genere situaciones que puedan generar episodios más graves de su situación inicial lo que obliga a actuar con la proporcionalidad adecuada, manifestaciones que fueron ratificadas por los responsables de la Policía Local.
Y por los vecinos asistentes se plantearon diversas quejas como consecuencia de la alta concentración de pequeños bares en el barrio que generan molestias en la vía pública que se agudizan en unos concretos ubicados en las calles Virgen de la Soterraña y Virgen de Covadonga y que están relacionados con las reuniones de personas en sus inmediaciones que generan molestias por suciedad y ruido al consumir bebidas a altas horas de la madrugada. Estas situaciones impiden el descanso de los vecinos que residen allí solicitando mayor control y sanción policial a lo que los responsables policiales insisten en el hecho de que se participe su detección recogiéndose la mayor información posible a fin de determinar si las bebidas proceden del interior de los establecimientos a fin de poder sancionar a sus infractores.
También se planteó la preocupación que existe en varias comunidades de propietarios de la calle Valladolid, sobre las obras que se están ejecutando en un establecimiento de discoteca próximo a abrir que desarrolla unas modificaciones estructurales que no se tiene claro estén ajustadas a las normas urbanísticas y que han sido denunciadas en varias ocasiones al Ayuntamiento de Ávila sin que se haya obtenido respuesta, algo que preocupa dado que existen antecedentes de molestias anteriores centradas en ese local comprometiéndose el primer teniente de alcalde a comprobar la situación actual.
Por último, se ha interesado en conocer cuál era la regulación que existe sobre el control de los pisos turísticos informándose por los responsables policiales de los mecanismos que ofrece la legislación en el caso de que existieran molestias en su caso.
En definitiva, los responsables policiales insisten en que la mejor forma de conseguir que la convivencia sea la situación habitual en nuestra ciudad se requiere la implicación de todos sus vecinos al detectar aquellas situaciones que la deterioren, trasladarlas con la mayor información a la Policía y considerar esta labor como un canal normal de comunicación estable y seguro que permita alcanzar la tranquilidad que todos desean.