Los consejeros de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, y de Educación, Rocío Lucas, constituyeron esta mañana la Mesa de Coordinación Científico-Tecnológica para la gestión de los fondos europeos de Reconstrucción Next Generation, en la que han participado 21 representantes de este ámbito en la Comunidad. Junto al Gobierno regional, conforman la mesa representantes de las cuatro universidades públicas, clústeres innovadores y centros tecnológicos, que, según apuntó Fernández Carriedo, “tienen que ser protagonistas” de la modernización y transformación de la autonomía que se busca con la llegada de esos fondos. “Tienen mucho que aportar porque tienen capacidad de gestión de fondos y recursos”, señaló. 

La mesa Científico-Tecnológica es un órgano de información y participación, que se reunirá de forma mensual y que tendrá como objetivo identificar fortalezas y coordinar capacidades para la aplicación de los fondos europeos. Entre sus funciones específicas está la de apoyar el diseño de proyectos de transferencia para los sectores productivos, incidiendo en la labor de digitalización de todo el tejido económico de Castilla y León, a la vez que fomentar su coordinación.

“Es una mesa de futuro, de unión y de participación, porque sin las sinergias y el protagonismo de todos los actores difícilmente se puede avanzar hacia la modernización y hacia el futuro de la Comunidad. Queremos que esta mesa sea estable y permanente, y que en ella jueguen un papel fundamental las universidades públicas”, destacó Rocío Lucas, para quien esta iniciativa “refuerza el papel de las universidades públicas y de sus centros tecnológicos y de investigación”, que son “claves para el impulso y la retención del talento”. 

La consejera de Educación afirmó que el objetivo de la mesa hoy constituida es propiciar un “intercambio de posiciones y planteamientos entre todos los actores que juegan un papel fundamental en la ciencia y en la tecnología”. “El binomio docencia-investigación, lo hemos visto a lo largo de esta pandemia, es fundamental para lograr el futuro y la modernización de la Comunidad. Estos fondos tienen que suponer un impulso a I+D+i, a la investigación y a la transferencia de conocimiento, porque sin transferencia de conocimiento universidad-empresa poco se puede avanzar en el ámbito de la ciencia, y en esa transferencia de conocimiento las universidades tienen un papel fundamental”, añadió. 

Según aventuró Carriedo, “una parte muy relevante” de los fondos europeos podría ir a investigación, ciencia y tecnología, ya que “al menos el 20 por ciento de los fondos debe ir a actividades relacionadas con digitalización, y al menos el 37 por ciento tiene que dedicarse a todo lo que tiene que ver con la economía sostenible”. “Todos los fondos son para transformar y modernizar, y ahí la investigación y la ciencia juega un papel activo”, señaló antes de recordar que Castilla y León es una de las cinco comunidades con más peso de su sector innovador y científico respecto del total del PIB autonómico correspondiente, principalmente por el factor de las entidades privadas y las empresas. “Una parte de estos fondos podría ser gestionada por el sector empresarial en materia de innovación, investigación y competitividad de las empresas en el ámbito internacional”, insistió.

Amplia representación

La Mesa de Coordinación Científica-Tecnológica cuenta con la participación de representantes de diversas consejerías de la Junta de Castilla y León, del Comisionado para la Ciencia y la Tecnología en la Comunidad, del Consejo Económico y Social, de las cuatro universidades públicas y de centros europeos de empresas e innovación.

Asimismo, participarán en este foro agrupaciones empresariales innovadoras y clústeres inscritos en el Registro de Castilla y León, como Facyl, del sector de la automoción; Cylsolar, energía renovable y soluciones energéticas; Vitartis, industria alimentaria; Biotecyl, salud; Cbecyl bienes de equipo; AEI, ciberseguridad y tecnologías avanzadas; SIVI, soluciones innovadoras para la vida independiente; Aeice, construcción eficiente; 4EYE, oftalmología y ciencias de la visión; minería sostenible y servicios asociados; y la asociación española de valorización energética de la biomasa (Avebiom).

También formarán parte de ella centros tecnológicos como la Fundación Cartif, la Fundación para la Investigación y Desarrollo en Transporte y Energía (Cidaut), el Instituto Tecnológico de Castilla y León (ITCL), la Fundación Centro Tecnológico de Miranda de Ebro (CTME), el Instituto de Biotecnología de Castilla y León (Inbiotec), el Centro Tecnológico de Cereales de Castilla y León (Cetece), el Centro Tecnológico Agrario y Alimentario (Itagra), la Fundación Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria (Cesefor), el Centro Internacional de Materiales Avanzados y Materias Primas (Icamcyl) y la Fundación Instituto Internacional de Investigación en Inteligencia Artificial (AIR Institute).

El objetivo de Castilla y León es lograr el acceso a 5.000 millones provenientes de los fondos denominados “Nueva Generación”. La mitad de los cuales serán gestionados por el Estado, con cargo a inversiones previstas en sus Presupuestos y destinados a apoyar la actividad económica a través de las Manifestaciones de Interés o los Proyectos Estratégicos; y la otra mitad, es decir, 2.500 millones, que serán gestionados directamente por la Junta de Castilla y León.

La Mesa Científico-Tecnológica que inició hoy sus sesiones de trabajo se suma a la Mesa Empresarial, constituida el pasado 20 de abril, y a la Mesa de Coordinación con las Corporaciones Locales, que se creó el pasado viernes, 30 de abril. Según detalló Carriedo, las tres mesas se suman a otros órganos de representación que ya estaban formalmente constituidos, como el Consejo del Diálogo Social, el Consejo de Políticas Demográficas, el Consejo Agrario, el Comité de Cooperativismo Agrario, el Consejo Castellano y Leonés de Salud y la Plataforma del Tercer Sector Social. Con la participación de todos los sectores en ellos representados, la Junta de Castilla y León busca “una salida de la crisis justa”, ya que los fondos Europeos de Reconstrucción y Resiliencia “no son fondos que llegan para el Gobierno de Castilla y León, sino para Castilla y León”.