Llegaron huyendo de la guerra y encontraron en Ávila manos amigas a las que aferrarse en sus peores momentos. Manos como las que desde Cáritas o Cruz Roja les tendieron para que pudieran empezar una vida lejos de casa, de Ucrania.
Desde entonces, allá por el mes de abril, han vivido muchas experiencias.Algunas buenas, otras no tanto. Pero los refugiados ucranianos que recalaron en Ávila siempre podrán recordar el calor que la ciudad y sus vecinos les prestaron en espacios como la residencia de los Padres Paúles donde hoy Cruz Roja en Ávila dará por finalizada la atención que les presta a las personas refugiadas ucranianas en este espacio cedido por Cáritas Diocesana de Ávila y Padres Paúles para desarrollar esta labor.
Se procede al cierre de este recurso porque la fase de emergencia del programa Declaración de Emergencia Crisis Ucrania, que se activó en base a la solicitud del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha finalizado. Y es que aunque en este momento continúan llegando a España personas ucranianas, lo hacen en niveles inferiores que en marzo.
Durante los seis meses que han transcurrido desde que el 2 de abril llegaran, en varios autobuses desde Barcelona, las primeras personas refugiadas procedentes del conflicto de Ucrania al centro, han vivido en la residencia abulense un total de 122 personas, a las que hay que sumar las atendidas en el Albergue Municipal de Cebreros y en un establecimiento hostelero de la capital abulense.
Entre los tres recursos, Cruz Roja en Ávila ha prestado una atención integral a 163 personas dentro del programa Declaración de Emergencia Crisis Ucrania del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
La mayoría de las personas que han pasado por este recurso, un total de 30, ya se encuentran en la fase dos del Programa de Acogida e Integración de Personas Solicitantes de Protección Internacional.
Esta fase implica que las personas refugiadas han alquilado su propia vivienda, con el apoyo de Cruz Roja en Ávila, y han encontrado trabajo o están en búsqueda activa de empleo. Otras seis personas están en la fase de acogida temporal del Programa de Acogida e Integración de Personas Solicitantes de Protección Internacional, en la que se preparan para pasar a fase dos durante un máximo de seis meses. Otras han vuelto a su país de origen o se han trasladado a países cercanos a Ucrania. Y algunas han viajado a otros puntos de la geografía española para reunirse con familiares o amigos.
Durante estos meses, las personas procedentes del conflicto de Ucrania que han sido atendidas por Cruz Roja dentro del programa Crisis Ucrania han recibido, además de alojamiento y manutención, asesoramiento legal y apoyo psicológico. Los menores de edad han sido escolarizados en distintos centros educativos de Ávila y han acudido a campamentos de verano del Ayuntamiento de Ávila y Cáritas Diocesana. Todas las personas del programa han sido apoyadas para solicitar la tarjeta sanitaria de Sacyl. Además, durante estos meses han aprendido castellano gracias a las clases impartidas en el Centro de Educación de Adultos por la Junta de Castilla y León. Aprendizaje que ha sido reforzado en la propia residencia por el voluntariado de Cruz Roja en Ávila.
Por otra parte, también se ha facilitado información y orientación a las personas que han pasado por las diferentes sedes y Asambleas Comarcales de Cruz Roja en nuestra provincia, que son 70 personas más.