Las carreteras abulenses, que suman alrededor de 8.050 kilómetros, registraron durante el pasado año 2021 casi medio millar de accidentes con animales implicados, exactamente fueron 483. 

Un dato de por sí llamativo pues supone de media 1,3 accidentes diarios, pero que lo es más teniendo en cuenta que supera la cifra de 2020 y también la de 2019.

Es casi normal que la de 2020 se vea superada pues hay que recordar que entonces tuvo lugar la llegada del coronavirus y las consabidas restricciones durante meses a la movilidad. Entonces se produjeron 391 accidentes con animales implicados. Ahora esa cifra se eleva un 23,5%.

Eso era prácticamente lo esperado decíamos, pero es que también en este 2021 se superan los datos prepandemia, los de un  2019 un año en el que se produjeron un total de 423 accidentes. Respecto a entonces se incrementa el porcentaje en un 16,5% (con 70 siniestros más). Lo más destacable de esta estadística facilitada por la Dirección General de Tráfico, dependiente del Ministerio del Interior, es que no se ha producido a consecuencia de estos siniestros ningún fallecimiento, es decir en general son daños materiales. 

sin víctimas mortales. Ahora bien en 9 de los accidentes que provocaron los animales se produjeron un total de 11 heridos leves y uno más que tuvo que ser hospitalizado. Pero lo importante es que no tuvieron muertes asociadas.

 La fauna que está detrás de estos siniestros es bastante variada pero destaca sobre todo una especie: el jabalí. Es él el que sobresale por encima del resto de especies ya que provocó o al menos estuvo involucrado en la mitad de los accidentes. Concretamente de los 483 siniestros, 248 tuvieron en el jabalí a uno de los «protagonistas». Por especies implicadas en los siniestros viales destacan también el corzo, el ciervo y los canes, por este orden. Sorprende que el corzo protagonice casi un centenar de accidentes, 94 para ser exactos y el ciervo y los cánidos, 34 cada uno.

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