La AIReF prevé un gasto en pensiones del 14,2% del PIB en 2050

EFE
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El organismo pide 10 años más de cotización y aumentar la edad efectiva de jubilación a 66 años para sostener el sistema de retribuciones

La presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), Cristina Herrero - Foto: Víctor Lerena

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) estima que en 2050 el gasto en pensiones podría situarse en un 14,2% del PIB, lo que supone un incremento de 3,3 puntos desde el nivel actual y un punto más que en sus previsiones de hace un año.

Según las proyecciones presentadas este lunes, este incremento del gasto refleja el envejecimiento en España que en 2050 tendría 54 millones de habitantes, con una población en edad de trabajar por encima de los 30 millones, lo que duplicaría la tasa de dependencia (población de más de 66 años dividida entre la de 16 a 66 años) del 26% actual al 53% en 2050.

O lo que es lo mismo, en 2050 habría dos trabajadores cotizantes por cada pensionista.

Según ha subrayado la presidenta de la AIReF, Cristina Herrero, se trata de proyecciones en un escenario central que podrían alterarse si se materializan algunos riesgos como unos menores flujos de migración neta, el estancamiento del mercado de trabajo o que la crisis de la COVID-19 tenga efectos estructurales o que no entrara en vigor el factor de sostenibilidad.

En el escenario central, ha subrayado Herrero, se ha optado por asumir que la crisis de la COVID-19 no tendrá efectos estructurales" aunque, ha apuntado, la "elevada" incertidumbre "hace aconsejable" empezar a analizar otras opciones que garanticen la sostenibilidad del sistema.

"Si la crisis sanitaria fuese más adversa de lo previsto, deberían tenerse analizadas otras opciones", ha apuntado Herrero, que ha señalado entre esas opciones, tener en cuenta la esperanza de vida en el cálculo de la pensión de entrada, vincular las revisiones no solo al IPC sino en combinación con otras variables, revisar la forma en la que computan los periodos de cotización o explorar otras herramientas como las cuentas nocionales o los sistemas complementarios.

En su presentación, la AIReF vuelve a insistir además en la necesidad de profundizar en la reforma de pensiones de 2011 retrasando la edad efectiva de jubilación, no la edad legal, de 64,1 años a 66 años y ampliando el período de la carrera de cotización.

Así, detallan que retrasar la edad efectiva de jubilación dos años y ampliar el periodo de cómputo para el cálculo de la pensión de 25 a 35 años podría contener el gasto en pensiones en 1,4 puntos del PIB.

También recoge que la entrada en vigor a partir de 2023 del factor de sostenibilidad implicará una contención del gasto de 0,9 puntos de PIB en 2050, un impacto mayor que el estimado hace dos años debido por esas nuevas previsiones demográficas con una mayor esperanza de vida a los 67 años.

Junto a esto insisten en la necesidad de cerrar el déficit estructural de la Seguridad Social y plantean trasladar la cotización por desempleo, asumiendo el Estado la pérdida del SEPE, así como que el Estado financie gastos no contributivos.

La AIReF ha enmarcado sus previsiones de gasto en pensiones calculando que el PIB real de la economía española crece una media del 1,4% anual entre 2020 y 2050, ya que tras un retroceso del 11,2% este año y un repunte del 5,5% en 2021, la brecha de producción se cerrará en 2025, un año en que el PIB real convergerá con el PIB potencial.

Este crecimiento económico unido a la reducción de la población en edad de trabajar permitirá reducir la tasa de paro hasta el 7% en 2050, pese a que este año se producirá una caída en el empleo equivalente a tiempo completo del 11,8%, que rebotará un 4,4% en 2021.

En cuanto a la población, la AIReF calcula que alcanzará en 2050 los 54 millones de habitantes (frente a los entre 51 y 60 millones que apuntaba hace dos años), por encima de las estimaciones de Eurostat (49 millones) y el INE (50 millones) debido a las "discrepancias" en torno a la afluencia esperada de inmigrantes.

La AIReF cree que España recibirá anualmente una media de 330.000 extranjeros entre 2020 y 2050 -por encima de los 275.000 de hace dos años-, principalmente procedentes de Sudamérica, Centroamérica y el Magreb, lo que elevaría el peso de la población extranjera sobre el total del 11% actual a casi el 18% al final del periodo.

Para calcular la población, la AIReF también ha tenido en cuenta, además de las migraciones, la fecundidad -que baja de los 1,7 hijos por mujer en 2019 a 1,43 en 2050- y la esperanza de vida al nacer, que en 2050 será de 86,8 años -89,5 años para las mujeres y 84,3 años para los hombres-.