El informe de recursos sanitarios públicos, dado a conocer cada año por Sanidad Castilla y León, indica la reducción de personal sanitario que se está produciendo en Ávila en los últimos años, con menos trabajadores en el área que antes de la pandemia y que es más acusado en Atención Primaria.

Según el último informe, que corresponde a 2021, Ávila contaba en Atención Primaria con 587 trabajadores, de los cuales 482 eran personal sanitario, ninguno temporal, y otros 103 trabajadores eran no sanitarios, además de contar de dos personas como directivos. El descenso que se produce respecto a antes de la pandemia (informe de 2019) y también respecto a 2020 se ve tanto en personal sanitario como en no sanitario pero en el caso de los primeros se observa una bajada de más de un doce por ciento respecto a los 548 empleados que había en 2019. De forma global, incluyendo a los no sanitarios, la bajada es de casi un once por ciento.

En el último año, según recoge el informe, el personal en Atención Primaria aumentó en la Comunidad, especialmente por las áreas de Palencia, Valladolid Oeste y León pero los mayores descensos se producen en Segovia y Ávila, con una variación negativa del 3,7 y el 3,3 por ciento respectivamente. Desagregando por tipo de personal, el número de efectivos sanitarios también bajó en Ávila, en ese caso un cuatro por ciento, aunque se incrementó en el conjunto de Castilla y León.

Respecto a la estructura del personal sanitario en Ávila se cuenta según el último informe con 185 médicos de familia y 17 pediatras, además de siete médicos más, dentro de una categoría que incluye urgencias y emergencias, odontólogos o jefes de unidad de coordinación médica. Además hay 219 enfermeros, diez matronas y otras 44 personas incluidas como otro personal sanitario.

Respecto al personal en Atención Hospitalaria, los efectivos totales en 2021 eran de 1.310 trabajadores en Ávila, de los cuales 985 correspondían a personal sanitario. También en este caso se ve un descenso a las cifras de antes de la pandemia, aunque porcentualmente es menos acusado. Entonces había 1.379 trabajadores, un cinco por ciento más, de los cuales 1.039 eran personal sanitario, un 5,2 por ciento más entonces.

La estructura de este personal incluía en 2021 a 235 médicos, 395 enfermeros, once matronas y 344 catalogados como resto de personal sanitario.

indicadores. En el informe también se incluyen una serie de indicadores de personal, que ayudan a poner las cifras en relación a la población.

En Ávila se contaba con 9,80 trabajadores sanitarios por cada 1.000 tarjetas sanitarias, lo que supone estar un punto por debajo de la media de Castilla y León. En realidad en Ávila se está por debajo en esta ratio tanto en médicos, 2,96 en nuestra provincia por cada 1.000 tarjetas respecto a los 3,28 de la región, o en enfermería (4,24 frente a 4,44). 

Sin embargo, en el caso de Atención Primaria la ratio de médico en función a 1.000 tarjetas se sitúa en 1,39 mientras que en la región es de 1,19. El dato es muy similar en pediatría, poco por encima de uno, y también es mejor en enfermería, con 1,53 frente a 1,21.

A pesar de estar mejores ratios lo cierto es que han empeorado en los últimos años como consecuencia del descenso de personal.

Otra consecuencia es lo que sucede con las tarjetas asignadas a los médicos. En 2021 la ratio de tarjetas que tenía cada médico de familia (mayores de 14 años) era de 720. Es decir, a cada médico le correspondían 720 pacientes, aunque evidentemente hay diferencias según los centros de salud y lugares. Esta media de Ávila, que aumenta desde las 576 de 2019, es mejor que la media de Castilla y León, que es de 839 tarjetas por facultativo.

En el caso de pediatría, a cada profesional le corresponden 970 tarjetas, superando las 921 de Castilla y León, mientras que en enfermería cada profesional atiende una media de 654 pacientes, mejor que el dato regional, que asciende a 830.

En cuanto a la Atención Hospitalaria se cuenta con 1,57 médicos por cada 1.000 tarjetas sanitarias, un dato por debajo de la media de Castilla y León, que es casi de dos profesionales. La historia se repite en enfermería, con 2,71 de estos profesionales por cada 1.000 tarjetas, mientras que en la región se superan los tres.

Si lo que se pone en relación son los efectivos según los recursos (camas instaladas), en el Complejo Asistencial de Ávila (formado por el hospital Nuestra Señora de Sonsoles y hospital Provincial) se cuenta con 0,53 médicos para cada cama y 0,92 enfermeros para cada una de ellas. Los datos son peores que antes de la pandemia.