Por fin el fuego comienza a dar un respiro. Cierto es que atrás quedan 4.500 hectáreas arrasadas en Cebreros, El Hoyo de Pinares y también el término de San Bartolomé de Pinares y pérdida de lugares de alto valor ecológico. La situación, aunque durante el día hubo reproducciones, se fue controlando gracias a un operativo formado por unos 300 efectivos sobre el terreno y una veintena de medios aéreos.

Según explicó a última hora de la tarde el jefe del Servicio de Incendios de la Junta de Castilla y León, Ángel Manuel Sánchez, se consiguió realojar a los vecinos de El Hoyo de Pinares y se mantuvieron los trabajos en todo el perímetro y la superficie del incendio. Lo más importante es que se consiguió ir cumpliendo la estrategia prevista, lo que otros días no había sido posible, en el perímetro dentro de una zona «sumamente complicada» por temas como la orografía.

Para la noche la predicción era que hubiera viento del norte con alguna racha intensa pero se mantenía la creencia de que «el trabajo realizado se puede aguantar.

Ese balance final llegaba tras una jornada en la que en la noche anterior y durante el jueves se había ido viendo más control y el trabajo estaba dirigido a la estabilización. Según explicaron por la mañana, la situación estaba más controlada aunque con zonas con llama. Había mejorado por la noche y de ahí ese control tras el «asedio» que se ha vivido, dijo el delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández Herrero, que habló de llamas que se han quedado a «escasos 30 metros del núcleo urbano» de El Hoyo. Se hacía un «buen balance» de la evolución de la noche, del trabajo realizado en las «peores circunstancias» y donde se realizaron «tareas  de contención del perímetro». Y ya se indicaba que a lo largo de esta mañana se seguiría trabajando en lo que será una jornada de consolidación de los trabajos.

Estando «mucho más controlado», el jefe de jornada Rodrigo Gandía, explicó que se la zona que seguía con llama era la parte superior de El Hoyo de Pinares, en la umbría de Valdegarcía, donde se concentran los medios pero se esperaba que los vientos no fueran tan fuertes y cambiantes.

A pesar de que la situación del incendio era mejor y había avances, aunque no se habla todavía de estabilización, se mantuvo el corte de las carreteras AV-502 y AV-561, es decir las que van de El Hoyo a Navalperal de Pinares y de El Hoyo a Valdemaqueda.

Además se mantiene el incendio en nivel 2, quedando trabajo de «días» para garantizar que no haya reproducciones, dijo Rosa San Segundo, jefa del Servicio de Medio Ambiente de Ávila, que pidió extremar las medidas de precaución porque queda «mucho verano todavía»

Las últimas estimaciones del incendio de Cebreros y El Hoyo de Pinares hablan de 4.500 hectáreas quemadas, lo que incluye superficie forestal de alto valor ecológico. Según la descripción que hizo el jefe de jornada, el fuego ha afectado a montes de utilidad pública de Cebreros, con El Castrejón y Gilgordo, y también de El Hoyo de Pinares, con una zona de pino piñonero de alto valor piñonero y paisajístico, con masas de ejemplares adultos, con algo de matorral de jaras y enebros. También hay zonas de pinos pinares, laricios y negral, además del alguna encina afectados por el fuego.

las zonas. En la explicación de la evolución del incendio, Rodrigo Gandía explicaba por la mañana las dos zonas con más preocupación era la parte superior de El Hoyo de Pinares, en esa zona de Valdegarcía, pero también la de Cebreros, en El Castrejón, que además es más abrupta y difícil de trabajar.

Comentó que se seguía trabajando «intensamente» en el incendio para lograr su control y estabilización después de que por la noche se hicieran trabajos en el flanco derecho y una zona que se 'escapó' y traspasó la zona de Valdemaqueda con un fuerte cambio de viento y supuso esa reactivación a la zona de la antena espacial y Robledo de Chavela. Es una zona que se ha logrado «perimetrar con ataque indirecto, con quemas controladas para terminar de asegurar ese perímetro».

También durante la noche, en la parte superior del incendio, la parte noreste (Valdegarcía), se siguió eliminando la vegetación que todavía no se había quemado, porque en esa umbría del monte de El Hoyo de Pinares es donde se concentra la mayor parte de combustible disponible «que nos puede dar problemas en función de la reactivación del viento porque es una masa arbolada muy densa». 

El incendio está dividido en seis sectores, que se están vigilando, incluyendo esa zona de El Castrejón (Cebreros) «como zona de orografía complicada, que no permite su perimetración y tenerla asegurada con maquinaria» por lo que se está trabajando y realizando maquinaria. En ese caso por la mañana contaban con la ventaja que el viento sur empujaba sobre lo quemado.

En cuanto al flanco izquierdo, la zona de Arrebatacapas, «está prácticamente sin actividad» aunque hay personal para vigilarlo.

Para todo este trabajo ha sido necesario un operativo con medios y personal de la Junta de Castilla y León, otras comunidades, el Gobierno (también militares) y de forma más cercana de la Diputación y los ayuntamientos, además del apoyo de grupos como Protección Civil o voluntarios. 

En toda esta labor se produjo la curiosidad de que la Diputación, con el equipo de gobierno encabezado por el Partido Popular, publicó en twitter una información con su «agradecimiento y admiración» a los bomberos del Ayuntamiento de Ávila (aquí el gobierno lo encabeza Por Ávila), destacando la entrega y el espíritu de colaboración que va más allá del convenio que puedan tener.

El propio alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, respondió que también ellos se sienten muy orgullosos del trabajo de los bomberos y de protección Civil y agradeció a la Diputación su reconocimiento.

En esta crónica más política, el secretario de Organización de Ciudadanos Ávila, Carlos López, agradeció la labor de todos los profesionales que están trabajando en la extinción del incendio forestal de Cebreros, así como la ayuda prestada por voluntarios de Protección Civil, otras asociaciones y los propios vecinos de la zona. Afirmó también que «es necesario impulsar medidas para evitar que estas terribles situaciones sigan ocurriendo» y para ello cree «necesario actuar en materia de prevención y gestión forestal».