Una tertulia de radio que da voz a los mayores

M.R
-

Onda Cero Ávila ha estrenado una sección que se emitirá cada dos lunes y en la que los protagonistas serán personas con más de 60 años que compartirán con los oyentes sus inquietudes, preocupaciones e ilusiones

Una tertulia de radio que da voz a los mayores - Foto: David Castro

Escuchar a los mayores, dar voz a sus necesidades, a sus inquietudes y a sus ilusiones y, sobre todo, poner el foco mediático en este colectivo de población que, siendo tan numeroso en una provincia como la nuestra, siente que la sociedad no le presta toda la atención que merece es el propósito con el que Onda Cero Ávila (102.7 fm) ha empezado a emitir una tertulia en la que los protagonistas son precisamente personas con más de 60 años. También tienen otra característica común: todos son usuarios del Centro Integral de Mayores Jesús Jiménez Bustos gestionado por el Ayuntamiento de Ávila. 

El espacio, incluido en el programa 'Más de Uno Ávila', se escuchará cada dos lunes poco después de las 12:25 horas. Ayer, día en el que se estrenaba, los encargados de ponerse ante el micrófono fueron Aurora San Segundo, José Ramón Plazas y Pilar Herrera, aunque la idea es que los tertulianos vayan rotando para tener la oportunidad de escuchar cuantas más voces, mejor. 

Y aunque la temática de la tertulia irá variando, en este primer día se abordó precisamente la discriminación por edad, un fenómeno constatado por los sociólogos sobre el que los tres protagonistas dieron su opinión poniendo ejemplos de su vida cotidiana en los que no se han sentido tratados o escuchados adecuadamente. Y varias de esas situaciones reales se desarrollaron en oficinas bancarias, cuyo trato a los mayores -según relató Pilar en la tertulia poniéndose en primera persona- deja bastante que desear por parte no solo de empleados poco pacientes con aires de suficiencia, sino también de quienes pretenden que utilicen la banca online sin apenas tener conocimientos de ello. La misma crítica plantearon nuestros protagonistas al cada vez más extendido uso de las aplicaciones digitales  para acceder al sistema sanitario, que en muchas ocasiones dificulta o directamente impide que los mayores puedan utilizarlas con la agilidad que, injustamente, se presupone a toda la ciudadanía.

A lo largo de la conversación los tres admitieron que cuando no se sienten escuchados o convenientemente tratados nunca manifiestan su incomodidad ante esa situación, por lo que se puso sobre la mesa la posibilidad de decírselo a su interlocutor, siempre con respeto y educación, para que el otro al menos tenga la opción de empatizar con ellos. 

También se les preguntó hasta qué punto se identifican con la palabra 'viejo/a' y aquí hubo opiniones discrepantes. Mientras José Ramón confesaba que él prefiere que se refieran a él como 'mayor', Pilar y Aurora no consideran que la palabra tenga connotaciones despectivas y la asumen como propia con naturalidad. Eso sí, en algún momento de la tertulia sí admitieron cierta incoherencia entre el cuerpo y la cabeza porque pese a que mental e intelectualmente se encuentran muy bien, en ocasiones el físico no responde como lo hacía antes. Así lo subrayó Aurora San Segundo, cuyo propósito para este año es precisamente «aprender a envejecer con elegancia y con dignidad», dijo.