La portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Ávila, Yolanda Vázquez, considera que «el futuro uso de la antigua estación de autobuses requiere de un debate que Por Ávila no tiene interés en que se produzca porque parece tener un empeño especial en que se derribe». Y es que entiende que «el derribo, además de innecesario, va contra la tendencia actual en las políticas públicas que apuestan por un cambio de modelo para primar la sostenibilidad y el consumo responsable de recursos, también en el ámbito de la construcción».
Por eso, en el Pleno de este viernes, el Grupo Socialista va a defender una moción en este sentido, pues como apunta Vázquez, «en nuestra opinión, el propio proyecto de la antigua estación de autobuses debe integrarse e ir de la mano del proyecto de ciudad que queremos. La rehabilitación es una política de vivienda más eficiente que la de nueva construcción, con mayores beneficios sociales y económicos inmediatos y tangibles, ya que mejora la calidad de vida de la población, arraiga a sus residentes en su entorno, mantiene la ciudad viva, crea actividad económica, preserva el patrimonio y garantiza la pervivencia de los espacios públicos como lugar de encuentro, de intercambio, de cultura y de relación».
Por ello proponen la elaboración de un proyecto, escuchando a la ciudadanía, para ubicar en dicho inmueble un espacio multifuncional y flexible para usos culturales, sociales y de ocio para los abulenses.
El PSOE también llevará al Pleno una propuesta que tiene que ver con un servicio que, según apunta su portavoz, «se suprimió en 2013 y que nos parece fundamental».
Se trata de la formación y dotación necesaria a los profesionales del Cuerpo de Bomberos de Ávila para la realización e intervención en maniobras acuáticas y subacuáticas. «Es un hecho habitual que se requiera al cuerpo para actuar y colaborar en diversas urgencias y emergencias en entornos acuáticos para efectuar, por ejemplo, rescates de bañistas en zonas pantanosas. Una tarea que requiere, no sólo de recursos materiales sino de una preparación específica, con prácticas, formación y reciclaje de las técnicas y estrategias de actuación, en cada caso. Algo de lo que adolece el Cuerpo de Bomberos de Ávila desde que, el 1 de mayo de 2013, se suspendiera la actividad de buceo sin que ello haya significado que los profesionales hayan dejado de atender las llamadas para asistir a maniobras que requieran la citada formación y herramientas», apunta Vázquez, quien añade que «aquella suspensión ha derivado en una situación de desamparo de los bomberos profesionales que deben enfrentarse a rescates y búsquedas en el agua sin contar con el apoyo necesario para estos casos».
En este caso, defenderán la implantación, por parte del Ayuntamiento, de las medidas para ofrecer al Cuerpo de Bomberos la formación y dotación material necesarias para garantizar la prestación de un servicio de rescate y salvamento en medios acuáticos y subacuáticos, «para completar una atención más integral por parte de dicho servicio».