El Cobijo ya es un espacio cardioprotegido. Faema ha instalado un desfibrilador externo semiautomático para su centro El Cobijo, al considerar que es fundamental "invertir en salvar vidas" a través de la prevención. Los trabajadores de esta asociación ya completaron el curso de formación para saber usar esta herramienta y este viernes son los usuarios del Centro de Día los que se acercan al DESA de la mano de la empresa Desfibriavila para familiarizarse con él y poder ayudar en uso, identificar algunos síntomas y para "no asustarse" en el caso de que se produzca una parada cardiorrespiratoria. "Queremos que las personas que vengan se encuentren lo más seguras posibles, ojalá no tengamos que usarlo que nunca", afirmó Inmaculada Pose, directora general de Faema, quien señaló la "tranquilidad" de poder contar con el aparato, sobre todo al trabajar con un colectivo, el de personas con enfermedad mental, que además tienen "un diagnóstico pluripatológico", un "perfil con un mayor riesgo de sufrir una parada cardiaca". Además, El Cobijo también cuenta con restaurante inclusivo y los fines de semana está abierto a la población en general, con niños y adultos, de ahí la importancia de que el DESA estuviera adaptado a niños de 1 a 8 años.