Desde Ávila a Marruecos para ayudar a los niños

M.E
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La expedición 'Amporni' retoma su actividad tras la pandemia. Una treintena de personas, a bordo de una docena de vehículos, iniciaron su viaje a Marruecos para llevar material escolar y ropa hasta el centro y el sureste del país africano

Desde Ávila a Marruecos para ayudar a los niños

TIENENpor delante un viaje «bonito y emocionante», pero seguro que también duro, lo que no ha impedido que más de treinta personas hayan decidido hacer un paréntesis en su vida en Ávila para sumarse a la expedición 'A Marruecos por los niños (Amporni)', el proyecto que desde el año 2013 lleva productos básicos al país africano y que este año se retoma por la pandemia. El abulense Emilio Burguillo vuelve a ponerse al frente del equipo que este sábado deja atrás la capital abulense dispuesto a recorrer unos 4.500 kilómetros en diez etapas al volante de una docena de vehículos que van cargados de material escolar, ropa, juguetes y de «todo el cariño y la solidaridad de los abulenses», según destacó la teniente de alcalde de Industria, Comercio y Turismo del Ayuntamiento de Ávila, Sonsoles Prieto, durante la despedida a la caravana materializada en la explanada del Lienzo Norte. 

Emilio Burguillo explicó que el 'Amporni' de este año ha tenido que cambiar su ruta por las condiciones en que se encontraban algunos alojamientos marroquíes y, tras entrar por Tánger, se dirigirán al centro del país para encaminarse después al sureste, donde harán «todos los pistones del sur». Se trata de una zona con «gente más nómada» que vive en condiciones delicadas y que presenta «muchas necesidades», de ahí la importancia de una misión solidaria cargada con medio millar de lotes de material escolar, unos 700 pares de zapatos y numerosas bolsas de ropa clasificadas por sexo y edad, para facilitar el reparto.

Material no ha faltado, no en vano durante la pandemia «seguí recogiendo mercancía y tendría para hacer tres 'Amporni' seguidos», detalló el 'capitán' de la expedición, quien aprovechó para agradecer la colaboración de todos los patrocinadores que llevan plasmados en los vehículos, especialmente de Calzados Merkal, que «todos los años nos dan 1.500 pares de zapatos». Tampoco se olvidó del trabajo realizado el 31 de julio en Blascoeles, donde «se clasificó todo el material. Se hizo lo más duro y ahora queda lo bonito», añadió Emilio Burguillo, una declaración que refleja lo que este empresario abulense siente por estos viajes humanitarios en África con los que busca «aportar nuestro granito de arena».

Burguillo recuerda que todo comenzó en 2013, cuando en una carrera de coches por Marruecos vio la «extrema necesidad» que existía en diferentes zonas del país  vecino, donde había familias que vivían en «tiendas de campaña hechas con piel de camello y que compartían espacio con las cabras, que les servían de calefacción». A partir de ahí se puso manos a la obra y surgieron las expediciones 'Amporni' pero también otras colaboraciones, de manera que cuenta ya sus incursiones en África en una veintena.

La caravana solidaria también fue despedida por el delegado de la Junta en Ávila, José Francisco Hernández Herrero, que se sumó al Ayuntamiento y agradeció tanto la labor como el ejemplo.