El paro se mantiene a la baja en la provincia de Ávila por segundo mes consecutivo, aunque el descenso, cifrado en 84 personas en números absolutos y en un 0,6% en términos relativos, es menos acusado que el registrado en el conjunto de Castilla y León (-1,3%) y el país (-1%). Así lo ponen de relieve los datos facilitados este miércoles por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), que sitúa en 13.261 los parados registrados como tal en la provincia a finales de abril. No obstante, en relación al mismo periodo del año pasado, cuando ya nos encontrábamos en plena primera ola de la pandemia, la provincia contabiliza 434 demandantes de empleo más, lo que supone un aumento del 3,4%. En este caso los números también hablan de una evolución peor que la de Castilla y León y España, donde los incrementos interanuales fueron más moderados, del 1,4% y el 2%, respectivamente.

El informe mensual del SEPE sigue reflejando que el paro femenino es superior al masculino. De los 12.261 parados contabilizados en Ávila la mayoría, hasta 7.679, son mujeres, frente a los 5.582 hombres. El desempleo juvenil (menores de 25 años) se cifra en 1.202 personas, en este caso con mayoría de hombres, y por sectores de actividad los servicios se mantienen, un mes más, a la cabeza, con 9.084 desempleados, casi el 70% del total. Le siguen, ya a más distancia, el colectivo sin empleo anterior (1.428), la construcción (1.174), la agricultura (797) y la industria (778).

Con todo, en el último mes fue el sector servicios el que impulsó el descenso, al registrar 62 parados menos, lo que puede achacarse a la reactivación de la hostelería tras las restricciones y a la Semana Santa, pese a su limitado impacto por el confinamiento perimetral de la comunidad. También redujeron demandantes de empleo la construcción (-37), la agricultura (-19) y la industria (-5), mientras que el colectivo sin experiencia laboral previa aumentó en 39 personas.