Las pensiones siguen aumentando en la provincia de Ávila, pero aún no han recuperado el terreno perdido durante la pandemia. Las pensiones continuaron durante el mes de agosto con la senda ascendente que iniciaron en junio para dejar atrás el desplome que habían experimentado los meses anteriores, en buena medida por el impacto de los fallecimientos de personas mayores por la COVID-19 y también por el cierre de las oficinas de la Seguridad Social por el estado de alarma. Aún así, la cifra de las pensiones registradas en Ávila todavía está por debajo de la de la del año pasado y sigue lejos de la que se contabilizaba en marzo.

En concreto, según los datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, la provincia de Ávila registraba a fecha de 1 de septiembre 38.526 pensiones. Son un 0,8% menos que las contabilizadas un año atrás, en una tendencia que también se dio en el conjunto de Castilla y León, aunque no así en el país, donde se aprecia un aumento mínimo. Eso sí, en relación al mes anterior se registra un incremento de 40 pensiones, lo que supone una subida porcentual mínima y permite continuar con la senda al alza. Si comparamos la cifra con la del arranque de marzo, el momento previo a la declaración del estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus, aún se contabilizan 333 pensiones menos en Ávila. 

De las 38.526 pensiones registradas en Ávila a 1 de septiembre la mayoría,  23.991, son de jubilación. Le siguen, ya a más distancia, las 10.037 pensiones de viudedad, 2.941 pensiones de incapacidad permanente,  1.317 pensiones de orfandad y 240 de favor de familiares.

La cuantía media de la pensión contributiva abulense queda fijada en 880 euros, de nuevo la segunda cifra más baja de las registradas en las nueve provincias de la comunidad, solo por delante de Zamora.