Francisco Gutiérrez Barcala ha fallecido esta mañana en Salamanca, en uno de cuyos centros sanitarios fue ingresado el pasado sábado, tras sufrir un accidente cerebrovascular, del que no pudo sobreponerse. Francisco G. Barcala era cronista oficial de la villa de Fontiveros desde el año 1994, municipio que le había nombrado hijo adoptivo cuatro años antes. También fue durante muchos años corresponsal de Diario de Ávila en Fontiveros y en esta zona de La Moraña, de la que escribía siempre que tenía oportunidad, ante cualquier acontecimiento que ocurriera en estos pequeños pueblos como Fuente el Saúz, municipio al que estaba muy vinculado. Francisco Gutiérrez Barcala era natural de la localidad salmantina de Cantaracillo, del que fue su alcalde y maestro. Alcalde por vocación política y de servicio a su comunidad y maestro, por vocación profesional.
Paco Barcala, como era conocido por los muchos amigos que tenía, entre los que me considero, fue uno de los grandes impulsores del Premio Internacional de Poesía San Juan de la Cruz, del que fue su secretario durante muchos años. También hizo las veces de presentador en los actos de entrega de este premio.
La última vez que vi a Paco Barcala fue en una mañana del mes de agosto del año 2016. Nos habíamos trasladado hasta Cantaracillo mi compañero fotógrafo David Castro y yo para realizar un reportaje para la serie Paisanaje, dentro de las Series del Domingo, que nuestro periódico publicaba un domingo de cada mes. Recuerdo que fue una mañana calurosa. Tanto David como yo disfrutamos de la cordialidad y la hospitalidad que siempre hacía gala Paco, cuando invitaba a su casa a sus amigos. Esa cordialidad fue doble porque su mujer Matilde, nos acogió con la mejor de sus atenciones. Recuerdo que fue una entrañable entrevista, realizada en su jardín, a la sombra de un árbol, cuya especie no recuerdo y con el aroma de una impresionante bungavilla.
Me habló de su vida, de su profesión a la que amó y disfrutó mientras la ejerció. Me comentó que su primer destino nada más salir de la Escuela de Magisterio fue el pueblo abulense de Navalosa, donde llegó en el año 1962. Recuerdo que me dijo que ese año todavía no había luz eléctrica en ese pueblo del Valle del Alberche. Me comentaba también que durante el tiempo en el que pasó en este pueblo abulense se hospedó en la casa del alcalde, 'el tío Julián'. Recordaba entonces que en este pueblo le tocó hacer de secretario del ayuntamiento accidental porque el funcionario no acudía todos los días y había que sacar algunos asuntos de urgencia… Así estuvimos hablando durante cerca de dos horas repasando anécdotas vividas. Fue una conversación muy amena y clarificadora para entenderlo. Después de realizar la entrevista nos desplazamos a 'su Moraña', donde David lo fotografió, en solitario y con su mujer, Matilde, que siempre ha sido su apoyo. Primero a Fuente El Saúz, el pueblo de Matilde y después a Fontiveros.
alcalde. Francisco Gutiérrez Barcala permaneció de alcalde de Cantaracillo durante 23 años, en dos etapas distintas. Recordaba que la primera fue la más complicada, también la más bonita, porque reconocía que eran muchas las cosas que había que hacer. Comentaba que en estas dos temporadas fueron muchos los proyectos que materializó para su pueblo: abastecimiento y saneamiento, un sondeo nuevo para el pueblo, un nuevo alumbrado público, construcción de la nueva Casa Consistorial, el Centro Médico, la creación de la escuela de párvulos, el teléfono automático, el frontón y el polideportivo, financiación del ayuntamiento, asfaltado de calles... Ahí es nada.
Corresponsal. Comentaba también en el reportaje que si había algo que Paco Barcala realizaba con total vocación era la actividad de corresponsal. Ya comentaba entonces que era uno de los más veteranos corresponsales de Diario de Ávila. Lo fue de Fontiveros durante muchos años. También escribió para la Gaceta Regional de Salamanca y para la Radio en Ávila. Comentaba entonces que todavía en esos años seguía enviando informaciones de su pueblo consorte, Fuente el Saúz y de los pueblos de la zona. Todavía ha seguido mandando noticias de estos pueblos hasta hace muy poco tiempo.
Descansa en paz viejo amigo. Siempre te recordaré y me acordaré de esta entrevista en el jardín de tu casa, a la sombra de un árbol, con el aroma de una impresionante bungavilla y una interesante conversación.