Centros de Cría Caballar de las FAS, ganaderos destacados

P.R.
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En Ávila, El centro de El Pradillo aporta, junto al resto de centros repartidos por España, 30 sementales de diferentes razas a las 1.300 cabezas de ganado que hay distribuidas en estos centros de las Fuerzas Armadas

Teniente coronel Francisco Crespo, jefe del Centro de Cría Caballar de Ávila - Foto: David Castro

Los centros de Cría Caballar de las Fuerzas Armadas, entre los que se encuentra el centro de El Pradillo, en Ávila, se han convertido en uno de los ganaderos equinos más importantes de España. Estos centros tienen en sus cuadras más de  1.300 ejemplares, cabezas de ganado de distintas razas equinas distribuidas en los diferentes centros repartidos por España. El Centro de Ávila tiene además una singularidad, desde el año 2011 también dispone de un centro de socialización canina, que aporta canes a las unidades cinológicas más importantes de las FAS  y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. 

En este momento el Centro de Cría Caballar de Ávila cuenta con un total de 30 sementales de diferentes razas:  De Pura Raza Española son 17; de Pura Raza Árabe, 2; un Angloárabe y dos Hispanoárabes. Caballos de Deporte Español son tres  y disponen también de dos impresionantes Bretones-hispanobretones  y tres asnos: uno de raza catalana y dos zamoranos-leoneses.

El centro lleva años trabajando años para conseguir una línea genética propia. La labor de los centros de cría caballar ha sido muy importante, como defiende el jefe de la unidad, el teniente coronel Francisco Crespo. «Cría Caballar se creó hace 157 años por decreto de la Reina Isabel II el 6 de noviembre de 1866. Desde entonces todo lo relativo a cría caballar ha estado gestionado en un primer momento por el Ministerio de la Guerra y después bajo distintas acepciones, por el Ministerio de Defensa» y añade, «a día de hoy somos uno de los ganaderos más importantes de este país, con alrededor de 1.300 cabezas de ganado de distintas razas». Reconoce Crespo que estos centros de las Fuerzas Armadas han sido muy importantes para las supervivencia de la raza santo y seña de este país, la Pura Raza Española.  «En el mundo de la Pura Raza Española, está claro que al haber sido uno de los ganaderos más importantes se ha influido en muchas de las líneas del caballo de Pura Raza Española. Estoy seguro que si ahora miramos los ascendentes geneológicos de distintos caballos españoles en distintas ganaderías seguro que sus ascendientes aparecen sangre de yeguada militar.  De esta forma la yeguada militar es importante para el mantenimiento de la raza. Se han creado líneas que han sido importantes en la cría de la PRE. Muchos ganaderos siguen siendo importantes para criar sus caballos de Pura Raza Española. Pero hoy en día ya hay otras líneas también de importancia de ganaderos españoles».

En cuanto al número de potros que pueden haber nacido en la zona de influencia a la que llega el centro de Ávila, el teniente coronel señala que no disponen de datos porque no se solicita al ganadero. «Ahora  prácticamente ese servicio que se da al ganadero alcanza entre el 80 y el 85 por ciento, incluso más. Podemos adivinar que la yegua está preñada si no nos vuelven a pedir un segundo envío. Aproximadamente para algunos trabajos que se han hecho que hemos necesitado saber, los índices de fertilidad rondan entre el 70 y el 75 por ciento. Es previsible que todos esos potros nacen».

Parada de Plana Mayor. La parada de Plana Mayor de Ávila permanece abierta a lo largo de todo el año, desde el 1 de enero al 31 de diciembre. Únicamente se cierra por descanso reproductivo desde el 30 de julio al 15 de septiembre, por descanso reproductivo de los sementales. El centro también vende esperma para fecundar a yeguas que se encuentran en todo el territorio nacional. «El tema de la fisiología reproductiva de la yegua es muy curiosa», señala el jefe de la unidad, que además es veterinario. «Nuestra zona en Castilla y León, en Ávila, el clima influye en el ciclo de las yeguas. Normalmente los periodos de anestro son largos y coincide con este tiempo que empieza a hacer frío. La luz también influye en la ciclicidad de las  yeguas. Estos días cortos las yeguas están en anestro, no sale el celo, por lo que no se pueden cubrir. En esta zona el anestro dura desde ahora hasta principios de marzo. Es difícil por ello que de esta zona se pida semen en esta época del año. En otras zonas como Andalucía o Extremadura, en los próximos días comienzan las temporadas de cubriciones. Así,  en Andalucía y en Extremadura,  donde los días son un poco más largos y al haber más bonanza, las yeguas no tienen un anestro tan largo como aquí y las temporadas de cubrición son más largas que en esta zona. Por este motivo la Plana Mayor permanece abierta durante prácticamente todo el año».

Este centro despliega una parada en las facultades de Veterinaria de Madrid y de Lugo. Estas paradas además de dar servicio al ganadero, también se utiliza para que los estudiantes de estas universidades públicas puedan realizar sus prácticas. Estas paradas se suelen desplegar, en el caso de Madrid, hacia la tercera semana del mes de marzo, o un poco antes, depende de cuando empiecen las prácticas los alumnos. Permanecerán abiertas entre 65 o 75 días. La parada de Lugo se suele desplegar, por el clima, un poco más tarde.

Territorio. En la página web del Centro de Cría Caballar de Ávila se muestran los caballos disponibles para cualquier ganadero. Se vende esperma equino a cualquier punto de España, incluso al extranjero, con previa autorización de la Subdirección General. En cuanto al despliegue de paradas para el envío de sementales, esto solo se puede hacer en  la zona de influencia del centro: Toda Castilla y León excepto Burgos y Soria; Galicia, Madrid y Castilla la Mancha, excepto Albacete.

Reconoce el teniente coronel que la pandemia ha implicado un trabaja más duro, sobre todo los primeros meses, «con aquella incertidumbre, que no sabíamos lo que iba a pasar. A  los animales no podíamos dejarles sin comer ni que no se ejercitaran. Por ello formalizamos dos grupos de trabajo, por si en algún momento alguien daba positivo. De esta forma podíamos disponer siempre de un grupo que pudiera estar trabajando. La verdad es que tuvimos suerte. Aquí en el centro no hubo ningún positivo en aquellos momentos. De hecho, hasta ahora no ha habido ningún positivo. La Parada  de Plana Mayor estuvo abierta con las lógicas medidas. No podíamos recibir personal. Entregábamos las dosis en la puerta y los mandábamos por distintos medios de transporte. La realidad es que el año pasado se cubrieron 630 yeguas, un número superior al que se registro el año anterior. Este año se ha notado menos y  ya se está por encima de las 650 yeguas. A nosotros la pandemia no nos ha afectado mucho. Pensamos que los ganaderos también iban a tener una cierta reticencia a cubrir sus yeguas, pero los veterinarios que inseminan estas yeguas también pudieron continuar trabajando. También hizo que esto no parara».