Llega el final del 2022 para Andrea Jiménez. Desde hace tiempo ya entrena con miras a un 2023 que, sobre la pista, tiene previsto comenzar con un control de marcas en la pista madrileña de Gallur en 200 y 300 metros. Será una primera salida a pista simbólica –«vamos a llegar con mucha carga encima»– aunque con muchas ganas, no sólo las propias por las fechas de temporada en las que estamos –«época de series, de gimnasio, de mucho volumen de trabajo... Es la más importante de todas para que luego salgan bien las cosas pero quizás la menos agradable, en la que no compites»– sino también por empezar a probarse sobre el 'tartán' después de un 2022 complicado, extraño, diferente para la abulense. Porque ni ella misma se veía donde se ha tenido que ver, tan lejos de su mejor versión, de sus tiempos, de las finales y las medallas.  

«Ha sido un año agridulce porque al final no llegaron los resultados ni pude cumplir con los objetivos que me había propuesto a principios de temporada, pero también ha sido un año de aprendizaje. No se puede estar siempre en lo más alto. También hay que pasar por épocas malas, en las que las cosas no vayan como esperas o quieres» comenta Andrea Jiménez tras un curso complicado. «No puedo hablar de un motivo exacto, fue un cúmulo de cosas» comenta Andrea después de una temporada en la que siempre ha insistido que sus entrenamientos eran buenos pero no conseguía que la puesta en escena lo fuera. «Ojalá hubiéramos sabido el por qué. Lo habríamos solucionado».

Sube el nivel de los entrenamientos en estas fechas. Ya está «a tope» la atleta del Playas de Castellón preparando la 2023.  «Estamos en la época más dura de entrenamientos. Ya no es pretemporada propiamente dicha.Es una época de mucho volumen, de mucha intensidad. Es en la que más sufrimos». Es momento de cargar las pilas sin competir. Todo enfocado a un primer objetivo de cara al 2023, reencontrarse a sí misma, volver a verse en su mejor versión. «Tras una época en la que no me he sentido bien compitiendo quiero volver a sentirme que estoy ahí, que soy competitiva.Quiero dar una buena versión de mi, que sé que sigue dentro. Hay que entrenar bien para que vuelva a salir» se pide a sí misma de cara a la próxima temporada. Es el punto de partida.

Quiere verse bien a sí misma siendo competitiva, porque en su distancia 'fetiche', los 400 metros lisos, el 2022 ha dejado la irrupción de nuevos nombres, nuevos rostros y especialmente nuevas marcas. «Para el 400 femenino el 2022 ha sido un año increíble, con mucha gente nueva, joven, capaces de correr mucho y con marcas muy buenas» comenta Andrea, que pone como ejemplo lo vivido en el Campeonato de España alAire Libre donde Eva Santidrián, Berta Segura y Laura Hernández bajando todas de los 53''. «No sé si ha ocurrido alguna vez»señala la abulense ante el podio del Nacional. «Es importante que suba el nivel. Al final nos llevará a mejorar a todas» tiene muy claro. «En lo  individual es más exigente pero para el relevo será muy importante.Pueden salir cosas muy bonitas».

Ha subido el listón en la distancia.Hace un año se hablaba de la necesidad de bajar de 53 segundos para poder plantearse se competitivo a nivel internacional, pero es que ya es una exigencia para ser competitivo a nivel nacional. «Viniendo de un año tan raro ahora mismo lo primero que quiero es volver a competir antes de pensar en tiempos, en marcas... Prefiero pensar en mi» reconoce la abulense después de un 2022 en el que sus tiempo han estado muy lejos de lo que eran habituales. «Es verdad que teniendo en cuenta que mi mejor marca eran 53''10 correr en 53'' no lo vería tan descabellado, pero vengo de un año corriendo en 54''50. Hablar ahora de esos tiempos...» ironiza la atleta del Playas de Castellón.

«De todo ello he aprendido a valorar lo que supone correr estando bien porque este año corría en 54''47 dejándome la piel. Otros años, a lo mejor, hacía esa misma marca en una semifinal dándome un paseo para no desgastarme... Este año me ha hecho aprender muchas cosa.Hasta este año nunca había tenido una temporada así. He tenido años mejores o peores pero nunca así.Por eso de cara a este 2023 lo primero soy yo, verme bien.Luego será turno para lo demás».

Un 2022 lejos de sí misma

No ha sido el 2022 que esperaba Andrea Jiménez. Ni lo esperaba ella ni nadie que la conozca.  Porque su trayectoria y el 2021 apuntaban otras cosas. Aunque no llegó a debutar, Tokyo 2020 fue la guinda final a una gran temporada 2021 en la que, entre otras cuestiones, debutó en el Campeonato de Europa Absoluto y tomó parte en el exitoso Campeonato del Mundo de Relevos. Todo aquello animaba a seguir pensando en un exitoso 2022, pero no fue así. Andrea nunca se encontró a sí misma sobre la pista. La abulense, que firmó en el Campeonato de España al Aire Libre 2021 los 53''10 como su mejor marca personal, no ha sido capaz este año de bajar de los 54''.   Fue bronce en el Campeonato de España Sub'23 de Pista Cubierta con 54''87 y plata en el Sub'23 al Aire Libre con 54''46. Se quedó fuera de la final en el Campeonato de España de Pista Cubierta con un discreto 55''21.Final que tampoco alcanzó en Nerja, en unCampeonato de España al Aire Libre con 54''47. Con todo ello este 2023 se presenta como un año para volver a ser lo que era.