Esta biblioteca callejera al principio contaba con algunas obras que Joaquín trajo desde Cádiz, como un primer depósito, que con el paso del tiempo ha ido creciendo hasta contar en la actualidad con más de cincuenta ejemplares.

La dinámica de este espacio literario es que cada vecino, tanto de Villarejo, como de los pueblos próximos, puede llevar cualquier libro que ya haya leído y no quiera seguir guardando en casa, así como coger cualquiera de las obras disponibles para poder disfrutar de ellas que luego tendrá que devolver cuando finalice, para que otra persona tenga la posibilidad de leerla también.

Una idea puesta en marcha gracias al trabajo de Coroni y Julián, quienes custodian los libros que ponen a disposición de los lectores desde por la mañana hasta por la noche en el banco enfrente de su casa. Aunque el verano sea la época de más afluencia, realizan esta labor durante todo el año, porque aseguran "cada vez son más las personas que se interesan por leer estos libros".

Quien se acerque a este banco de lectura tendrá la opción de leerlo allí o llevárselo a su casa y acercarlo cuando lo haya terminado. De esta manera, se busca potenciar la lectura entre los vecinos, contando con ejemplares dirigidos tanto para mayores como para niños, haciendo que la edad no sea un problema para poder disfrutar de la lectura.

Un día en la biblioteca callejera. Coroni y Julián se levantan a las ocho de la mañana para poner todos los libros a disposición de los vecinos en el banco de lectura, en donde cada uno escoge a su gusto la obra que leer. Una iniciativa que hace que el pueblo se vuelque en la cultura, que tal y como asegura Coroni, "mientras podamos lo vamos a hacer". La biblioteca no tiene horario, está disponible durante todo el día, desde que se levantan hasta que se acuestan, y son ellos los que están pendientes de atender a quienes quieran disfrutar de la lectura con uno de sus libros.

Los vecinos del pueblo como Matilde, se alegran de que este proyecto esté en marcha y agradecen la labor y el tesón con el que Coroni y Julián trabajan a diario por poner en valor la cultura en su pueblo, para que sirva como referente para otros municipios.

Tal y como asegura Coroni, la acogida de esta iniciativa es cada vez mayor, ya que cada temporada los vecinos acercan sus libros para colaborar con esta actividad literaria para hacer que esta labor continúe en Villarejo del Valle.

Para que esta iniciativa pueda seguir adelante, Coroni y Julián animan a todos los vecinos tanto de la provincia como de Ávila para que se acerque hasta Villarejo del Valle a conocer esta biblioteca callejera y puedan participar en ella, invitando a todos los interesados en la lectura a visitarles en la calle San Sebastián 16.