Los vecinos de San Antonio y especialmente de las viviendas cercanas al parque y al pinar del mismo nombre volvieron a tener una noche movida en lo que a botellones se refiere en la madrugada del sábado al domingo. Coincide en el tiempo con las fiestas del barrio que, si bien apenas tienen actos, más allá de los religiosos y de la muestra de folclore del sábado por la tarde, sí se ha notado durante todo el fin de semana que era tiempo de su celebración (con más ambiente por las calles durante prácticamente todo el día).

Precisamente vecinos del lugar contactaron con Diario de Ávila para expresar su malestar por este tipo de reuniones multitudinarias y en torno al consumo de alcohol y a la música a elevado volumen en el jardín de San Antonio  hasta altas horas de la madrugada.

Preguntado el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Ávila por esta situación, por si había constancia y por si se habían tramitado denuncias al respecto, reconocen que efectivamente fue en torno a las cuatro de la mañana cuando hubo «más jaleo» e interviene la policía local «tanto por ruido como por botellón, falta de distancia de seguridad o medidas anticovid».

En cualquier caso han querido manifestar que ha habido constantemente presencia policial en la zona. Concretamente dos patrullas estáticas «como mínimo» han estado en el parque y aledaños durante el fin de semana; si bien en total a la zona se han destinado cinco patrullas y 11 efectivos, aseguran.

En momentos puntuales, dada la celebración religiosa de la festividad de San Antonio y la posterior muestra de folclore se cortaton accesos desde el paseo Don Carmelo a la calle La Sierpe y también hubo un punto de control fijo para impedir el acceso al tráfico rodado a través de Santa Cruz de Tenerife.

El botellón en cualquier caso ha sido un hecho que confirman fuentes municipales y habrá que esperar para saber las sanciones o inicios de expediente sancionador y en qué conceptos.

Limpio desde primera hora. Lo que sí hemos de decir también es que desde primera hora de la mañana operarios del servicio de limpieza trabajaron en la zona y a eso de las 9,30 horas el parque estaba limpio, sin restos de botellón y en buenas condiciones para las muchas personas que acuden por la mañana a disfrutar de sus paseos, a correr o a sacar a los perros. Hasta tres camiones de limpieza salían del parque a esa hora, uno de recogida de basuras, otro para la limpieza con agua y uno más pequeño con otros dos operarios de a pie.