Fernando Aller

DESDE EL ALA OESTE

Fernando Aller

Periodista


En carne viva

14/01/2022

Que la verdad no te estropee un buen titular. En las redacciones de los periódicos es frecuente escuchar esta frase, entre la ironía y el cinismo, como contrapunto al esforzado empeño de todo buen periodista de ceñirse únicamente a datos veraces contrastados. La verdad es asunto que cotiza a la baja, en unos casos porque la buena información es cara y en otras circunstancias porque se le pone la etiqueta de información a lo que es simple propaganda o directamente bulo. Qué es la verdad. Un hombre se atrevió a decir que la verdad era él y acabó crucificado.
No se sabe si el ministro de Consumo, Alberto Garzón, acabará cual churrasco de novilla. De momento ya está bastante quemado. Lo que resulta evidente es que el PP se ha aferrado a una verdad por aproximación cual clavo ardiendo, como estandarte de su apuesta electoral en Castilla y León. Garzón declaró en un periódico británico que los animales estabulados en macrogranjas sufren maltrato y producen una carne de peor calidad que los criados en espacios abiertos. La ganadería extensiva, con animales correteando por valles y montañas, frente a la intensiva, más parecida a una cadena de montaje industrial. El problema del ministro de Consumo es que dio pie al titular, cocinado por el PP, de que la carne que exporta España al Reino Unido es mala. Los titulares no entran en matices y Garzón el imprudente, que debería de saber algo de comunicación, sirvió en bandeja munición al PP para la campaña electoral. Magnífico regalo, porque a un mes de las elecciones en Castilla y León tal afrenta, torticeramente adobada, evitará que otros asuntos de mayor interés ocupen tiempo y espacio en el debate público. Solo en ese afán interesado y reduccionista puede entenderse la ausencia de criterios constructivos sobre las excelentes condiciones que ofrece Castilla y León para la felicidad y buena crianza de los animales hasta su sacrificio. Una excelente forma de cuidar el medio ambiente y de luchar a la vez contra la despoblación. Un sistema más eficaz para que la calidad del chuletón en la mesa vaya unida a la generación de riqueza y la creación de empleo. Una apuesta, una más, para quienes llenan su boca de España vacía. Ese debería de ser el debate.