No cabía un alfiler en el centro residencial Domus VI Decanos Ávila en la tarde de este martes y es que todos estaban llamados a la cita con la fiesta anual -desde hace doce años- en la que entregaban sus conocidos como Premios Decano. Una forma de agradecer a determinadas personas relevantes su entrega y su cariño hacia el centro y sus residentes. En esta ocasión los nombres y apellidos de los galardones eran los de Jesús Manuel Martín Hernández ‘El Cascabel de Ávila’ como Decano Provincial, Alfonso Pahíno como ‘Premio Decano XII Aniversario’ y el de María Jesús Pardo como ‘Decano del Centro 2019’.
De sobra conocido es ‘El Cascabel de Ávila’, implicado en estos momentos en llevar su forma de entender el flamenco por Andalucía, pero sobre todo volcado con un centro residencial en el que no pocas veces ha actuado y, según aseguró ayer, que estará siempre dispuesto a hacerlo, cada vez que le llamen procurará hacer un hueco en su agenda para complacer a este veterano público que siempre le recibe con los brazos abiertos. Y es que no es de los que se olvidan de ‘su gente’ por el hecho de que le entreguen un premio, se comprometía.
Agradecido, emocionado y cargado de afecto desembarcaba en Decanos también un Pahíno que fue presentado por la maestra de ceremonias del acto , Carmen Esteban (de la Cadena Ser), como una de las grandes voces de los años 70 y 80 de nuestro país, vallisoletano de nacimiento, y para quien no lo sepa flamante ganador de la edición de 1977 del Festival de Benidorm, además llevaba ya varios años posicionándose para ser reconocido. Conocido en el centro también se comprometió a seguir apareciendo por allí para deleitar a sus mayores, que tanto agradecen la alegría de la música.
Precisamente una de las que más sabe de lo que es disfrutar años y años de música, de vida y de trabajo era la galardonada como decana del Centro 2019, María Jesús Pardo. Una pionera, la primera mujer farmacéutica de la ciudad de Ávila después de la guerra. Nacida en el centro, en la calle Reyes Católicas, descendiente de la familia de Cristóbal Pardo, ya saben el famoso bazar ubicado aún hoy en la citada calle y que fundó su abuelo. Espléndida a sus 100 años (los cumplió el 16 de diciembre) y seis meses, tal y como se encargó de recordar su hijo Gerardo, y quien hizo una semblanza amable y emocionada de aquella que le dio la vida, a él y a sus tres hermanos, a José Ramón, Enrique y Antonio tras casarse con Gerardo (un funcionario de Hacienda destinado en Ávila y que aquí se quedó por amor). Lo dicho un homenaje emociwonado del que también fue testigo otra de las ilustres residentes, Enriqueta Álvarez, agasajada con un ramo de flores.
Presenciando todo, sus compañeros, la directora del centro Ana María Rodríguez, pendiente de cada detalle, los trabajadores, todos, porque «voluntariamente» habían querido preparar el que es el gran acontecimiento del año en esta residencia. Y junto a ellos también y como relató Esteban el Mago Monty, de quien salió la idea de unos premios que también galardonaron en el pasado a grandes figuras del panorama social o musical español, grandes como Karina, Ortega Cano, Concha Márquez Piquer, Manolo Escobar, Los del Río, Encarnita Polo, Malena Gracia, pero también abulenses no menos ilustres y queridos como Gonzalo González de Vega (que ayer no se perdió la celebración), el practicante Amalio, el reconocido Lucio (restaurador y famoso por los huevos Lucio), José Tomé y tantos y tantos otros.
Entre el público, miembros de la nueva Corporación Municipal, como Javier Ajates o Rocío del Monte, el procurador Miguel Ángel García Nieto, la senadora Patricia Rodríguez y numerosos representantes de asociaciones como Alcer, Aspaym, AECC, Aspace, Faema (y muchos más que no caben en esta crónica) y que pudieron disfrutar de la música de El Cascabel y Pahíno y es que ¿cómo no se iban a arrancar a cantar teniendo en cuenta que es lo que les ha llevado a recibir el galardón?