Con una sonrisa y con no menos sensación de alivio después de prácticamente dos meses y medio sin poder entrenar. La Fase 0 les dejó con las ganas. Podían ya salir a la calle a correr pero para quienes pasan su vida sobre las pistas de atletismo, las canchas de tenis o los campos de golf no era suficiente. Han sido meses de espera, pero con la apertura este lunes de las instalaciones al aire libre Paula Arias, Marta Muñoz o Andrea Jiménez han vuelto a sentirse deportistas. «Es el mejor torneo que podía jugar en estos momentos» comentaba Marta Muñoz en su regreso al césped de Naturávila. Una sensación que han podido compartir todas ellas, tres de las mejores deportistas abulenses, pero en la que coinciden muchos después de unas últimas semanas en las que la espera ya se convertía en impaciencia. Han sido meses de mantenimiento. Ahora llega otro momento, el de volver a recuperar poco a poco un estado de forma óptimo desde el que poder volver a retomar calendarios de competición que, con estos avances, empezarán a recuperar citas perdidas.
No quiso perder ni un segundo Marta Muñoz. Desde primera hora de la mañana ya pisaba la hierba de Naturávila Golf. La Fase 0la permitía salir a la calle pero en su caso poco más. «Seguiré con la pelota de papel aluminio y a patear la alfombrilla de dos metros» decía con resignación. Su disciplina necesitaba algo más, un campo que ya tiene a su disposición. «Es el mejor torneo que me podían dar después de la competición más dura de mi vida» reconocía la abulense en su vuelta a los entrenamientos. «Ahora queda mucho trabajo». Ha sido mucho tiempo parada. «Poco a poco podremos recuperar la forma de antes e incluso superarla». Porque el regreso lo hace con ganas.
Ganas las que le puso Paula Arias al volver a pisar las canchas de tenis. Y sus motivos tenía. La crisis del COVID-19 llegó mientras la abulense disputaba su primer ITF del 2020. Después de una intervención en la que la retiraron los clavos del tobillo de la anterior –2018– operación, y tras su recuperación y vuelta a los entrenamientos, la abulense afrontaba su primer torneo del año con ganas de volver a las pistas. «Ni un ITFme ha dejado disputar» decía tras un regreso precipitado desde Turquía. Tras semanas de mantenimiento de forma en casa y algún que otro pelotazo en el garaje, la abulense entrena de nuevo sobre la pista. Y lo hace en Barcelona, donde se encuentra ya. El pasado fin de semana regresaba a la que es su ‘segunda casa’, el CTBarcino y la Ad InnTennis Academy. «Ya estamos de vuelta» señala la abulense en el regreso a la actividad de su academia. «Había ganas de darle» reconocía la tenista con las primeras ampollas en los dedos «y las que quedan». El confinamiento la dejó con las ganas y con ganas ha vuelto a ponerse en manos de Albert Portas.
Aguardó hasta el martes para volver a pisar las pistas de la Ciudad Deportiva, donde tantas veces ha corrido. Pero esta vez era diferente para Andrea Jiménez. «Ilusionada» lo hacía por volver a pisar el «tartán después de tanto tiempo y de poder ir volviendo a la normalidad en los entrenamientos» señala la abulense, que se tuvo que venir de Madrid, de la Residencia Blume, tras el cierre decretado por la pandemia. Poco a poco. De momento aún no puede acceder al gimnasio. «Lo echo en falta, ya que en casa no dispongo del material necesario y es parte fundamental de mi entrenamiento».
Se reactiva el deporte a nivel individual y de clubes. Ya está en marcha el CT Paramera, que recupera sus clases y entrenamientos – todos los interesados pueden contactar con Daniel Pacho en el 685 339 449 y en el email danipacho_88@hotmail.com– en una actividad que permite la distancia de seguridad. En la misma Ciudad Deportiva el Puente Romanillos –a partir de los Sub’16– ya regresa a los entrenamientos. Otros, como el Jacqueline Runners, han buscado espacios alternativos en la ciudad –calles aledañas al CUMCarlos Sastre– para el reinicio de la actividad.