Rafael Aita, investigador hispanista y conocido en YouTube como Capitán Perú, presentó en el Palacio de Polentinos, en el Archivo General Militar de Ávila, su nuevo libro 'Los Incas Hispanos', con el que pretende dar a conocer la historia compartida entre Perú y España y redescubrir la alianza 'Hispana Inca'.

Su obra, dijo, «rompe muchos prejuicios» y recordó como muchas personas le han dicho que «cómo van a ser incas e hispanos si más bien los hispanos se enfrentaron a los incas y eran enemigos» pero lo que hace el libro es «romper esta falacia. Muchos piensan que durante el proceso de conquista, los incas fueron sometidos y esclavizados, en el mejor de los casos, y asesinados, en el peor, y no es verdad. Sobrevivieron muchos incas que tuvieron el nombre de Inca, hablaban quechua, se ceñían la borla del inca, eran incas en todo sentido, pero también hablaban español, latín, eran católicos y los más poderosos aliados del rey de España. Por lo tanto, eran incas hispanos».

En este contexto, en Ávila se cuenta con dos figuras relacionadas con este momento de la historia, el primer virrey de aquel territorio, Blasco Núñez Vela, y el conocido como el 'pacificador del Perú', el barcense Pedro de Lagasca.

«Uno con mejor fin que el otro», asegura el autor, que recuerda que  Núñez de Vela fue enviado para apagar la sublevación de Gonzalo Pizarro y terminó siendo decapitado en Quito y, «en vista que no funcionó la pacificación por las armas, se envió a Pedro de Lagasca con una Biblia en la mano a impartir indultos y perdón». En aquella época se pensó que era «un disparate» y quizá, reflexiona, ahora se pensaría igual, pero lo cierto es que «funcionó» y «las tropas de Gonzalo Pizarro se pasaron al bando del Rey, lo dejaron solo, y es así como Pedro Lagasca logró la pacificación y ser uno de los personajes más importantes para la historia del Perú».

Su obra, asegura, ha tenido una «acogida positiva en general», si bien es cierto que «la gran mayoría se sorprenden con esta información, algunos se sorprenden negativamente, pero más se sorprenden positivamente porque es algo que no nos han enseñado en el curso de Historia ni en España ni en el mismo Perú». Afirma que a ellos «también en Perú nos dicen que llegaron los españoles y mataron a los incas e impusieron su régimen político y cuando nosotros encontramos en los museos la iconografía, los cuadros pintados por los mismos descendientes incas donde se  retrataban a sí mismos sosteniendo una cruz o el escudo de armas que les otorgó el Rey de España, nos damos cuenta que nos han mentido y que la iconografía nos revela la evidencia histórica. Esto es sorprendente porque estamos redescubriendo esta alianza hispana inca que mantuvo el virreinato del Perú por 300 años».