La historia clínica digital o la receta electrónica interoperable son dos de los avances más destacados que se han implantado en los últimos años en el sistema nacional de salud, pero lo cierto es que los servicios sanitarios autonómicos presentan en líneas generales un «bajo índice» de transformación digital. Así lo concluye un estudio reciente de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) y la Fundación Cotec, en el que se ha buscado conocer el grado de implantación de la salud digital en España. 

La sanidad nacional recibe en este informe un 3,1 sobre un total de 10, suspendiendo, además, en todos los ámbitos analizados. La calificación más alta la obtiene en infraestructuras tecnológicas, donde la madurez digital se sitúa en un 42,3 por ciento, una proporción similar al que recibe en el área de servicios digitales para profesionales.