La provincia de Ávila ganaría prácticamente 500 habitantes en los próximos 15 años de mantenerse las tendencias demográficas actuales. Esa es, al menos, la proyección de población que el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha realizado para nuestra provincia dentro de un informe que, aclaran, no constituye una predicción, sino una muestra de la evolución que seguiría la población de mantenerse las tendencias actuales. En concreto, y siempre según esta estimación, la provincia de Ávila pasaría de albergar a 159.062 residentes (el dato del 1 de enero de 2022, todavía provisional) a 159.561 en el año 2037. Esta proyección que difundió este jueves el INE contrasta con las últimas que había elaborado el mismo organismo para la provincia en 2018 y en 2020, las cuales hablaban de una posible pérdida de más de 17.000 personas en los siguientes 15 años.

La proyección de Ávila, con esos 499 vecinos más estimados para 2037, dejan a la provincia como una de las tres de Castilla y León con aumento de habitantes a 15 años vista, junto a Segovia y Soria, en estos dos casos con una mayor ganancia que Ávila, de 4.296 vecinos y 3.292, respectivamente. El resto de provincias saldan este periodo futuro con menos habitantes, sobre todo León y Burgos, para arrojar una pérdida total cercana a los 97.000 residentes. Castilla y León es, de hecho, la comunidad que registraría un mayor descenso de habitantes de persistir la tendencia actual, por delante de Asturias, Extremadura, Galicia, Ceuta y Melilla, los únicos territorios del país con una proyección negativa.

Y es que, según las proyecciones publicadas por el INE, en los 15 próximos años España ganaría 4.236.335 habitantes (un 8,9%), hasta superar los 51 millones de personas en 2037. En el año 2072, por su parte, la población alcanzaría los 52,9 millones, con un incremento de 5,45 millones de personas.

El progresivo e ininterrumpido aumento de las defunciones, siempre superior al número de nacimientos, daría lugar a un saldo vegetativo negativo durante todo el periodo proyectado. Con todo, este saldo vegetativo negativo sería superado por el saldo migratorio positivo, lo que provocaría un aumento de población durante todos los años del periodo proyectado. El aumento de población se debería exclusivamente, por tanto, a la migración internacional, lo que produciría que la población nacida en España disminuiría paulatinamente y pasaría de significar el 84,5% del total al 63,5% dentro de 50 años.

En Ávila se da una tendencia parecida. Aunque se cree que los nacimientos podrían aumentar ligeramente, las defunciones, aun con alguna oscilación, se mantendrían, con lo que dentro de 15 años también se espera que el crecimiento vegetativo sea negativo. El aumento de población vendría de los movimientos migratorios con el resto del país y con el extranjero, en el segundo caso con algo más de volumen aunque con el primero en aumento.