Como "un instrumento de coordinación para visibilizar la magnífica labor que existe en materia de sensibilización, formación e integración social, cultural y laboral de todos los inmigrantes de la provincia ". Este es, a grandes rasgos, el objetivo con el que nace el Consejo Provincial de Inmigración, constituido este viernes en Naturávila de la mano de la Diputación para dar voz a todos los agentes que trabajan con las personas extranjeras de nuestra provincia, algunos más de diez mil según el último dato del INE y con predominio de la nacionalidad marroquí.
El nuevo órgano está presidido por Carlos García, presidente de la institución provincial, tiene como vicepresidenta a Beatriz Díaz, presidenta de la Comisión de Familia, Dependencia y Oportunidades, y en las vocalías cuenta con representantes de los nueve ayuntamientos de la provincia con mayor incidencia de la población inmigrante en relación al total y en términos de desempleo (Arenas de San Pedro, Arévalo, Cebreros, El Tiemblo, La Adrada, Las Navas del Marqués, Navalperal de Pinares, Piedrahíta y Sotillo de la Adrada); las cinco asociaciones de extranjeros (Asociación Multicultural por la Integración AMI, Comunidad Islámica de Ávila, Asociación Cultural Casa de Copérnico, Avita Tierra de Acogida y Asociación Saharaui en Ávila) y las tres ONG (Cruz Roja, Cáritas y Accem), además de representantes de la propia comisión provincial, de la Junta y de la Gerencia Territorial de los Servicios Sociales.
Se trata, según destacó Carlos García, de poner "una herramienta más al servicio de la sociedad que busca el bien, la tolerancia y el respeto hacia todas aquellas personas que buscan un acomodo en la provincia", al tiempo que "visibilizar y promocionar la magnífica labor que realizan las asociaciones de extranjeros de la provincia".
La vicepresidenta de la Diputación, Beatriz Díaz, explicó que con este Consejo también persiguen "sensibilizar y educar a las administraciones locales sobre la convivencia de las personas extranjeras en los municipios para que tengan un asesoramiento y una formación para que, si fuera el caso, puedan acceder al mercado laboral". En este sentido, aseguró que en líneas generales hay "una buena convivencia" con el colectivo extranjero de la provincia, "pero eso no significa que en algunos municipios donde la población está aumentando no tengamos, no problemas, pero a veces sí falta de entendimiento entre la administración local, los vecinos y las personas extranjeras a las que les cuesta adaptarse", admitió, para añadir que desde Diputacion quieren "facilitarles las herramientas para que haya consenso y un mejor entendimiento entre todos".
El Consejo Provincial de Inmigración tendrá una comisión permanente que se irá reuniendo en función de las demandas y que contará con mesas de trabajo para estar "al día" y poder solucionar "los problemas que vayan surgiendo", señaló Díaz.