El PP rechaza las ordenanzas porque no responden a la crisis

M.E
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"No es hora de congelar tasas, es hora de bajarlas", señaló la portavoz del PP en el Ayuntamiento, que insiste en que había margen para reducir impuestos

El PP rechaza las ordenanzas porque no responden a la crisis

"No es hora de congelar tasas, como si estuviésemos en 2019, es hora de bajarlas". Así de contundente se mostró la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Ávila, Sonsoles Sánchez-Reyes, quien confirmó que el voto de su grupo en el Pleno del próximo viernes, en el que se aprobará el proyecto de ordenanzas fiscales para el año 2023 con la mayoría de Por Ávila y Ciudadanos, va a ser 'no'. Sánchez-Reyes habló de unas ordenanzas "continuistas" y que "no responden a la situación tan difícil de la economía local", marcada por una elevada inflación y por los coletazos de la pandemia. "No podemos apoyar el proyecto, Por Ávila y Cs tendrán nuestro 'no', al igual que ellos han dicho 'no' a los abulenses y sus necesidades", señaló la portavoz , quien a modo de conclusión remarcó que "las cuartas ordenanzas fiscales del alcalde y su equipo de gobierno van a reincidir en todo lo que mantiene a Ávila lastrada a base de parches, sin liderazgo y si proyecto".

A su juicio, y pese a la situación actual de crisis, que también afecta a un Ayuntamiento que tiene que "gastar más", "hay margen para bajar la fiscalidad", no en vano "la Administración General del Estado está recaudando más" por la inflación y al Consistorio "le llegará más dinero" de la participación en los tributos del estado. Frente a eso, el equipo de gobierno "mantiene el hachazo del IBI" a los abulenses impulsado hace tres años con una subida del 8,6% que, además, "no se ha notado en la mejora de los servicios ni en nada", reprochó. 

La aceptación de tres enmiendas del PP a las ordenanzas tampoco ha sido suficiente para dar el apoyo al proyecto. "Nos dijeron que si las aceptaban todas se perderían 2,5 millones para servicios, pero luego dicen que hay superávit", el último año de 6,4 millones de euros, de ahí que para los populares sería mejor bajar los impuestos a ciudadanos y empresas y luego tener algo menos de superávit.

El grupo del PP considera que, en el marco de una crisis global, "Ávila va a la contra" y Por Ávila "no se conforma con detener la prosperidad de esta ciudad, sino que se empeña en retrasarla" con tres actuaciones, "recaudar, cuando gobernar no es eso; perder recursos, con la pérdida de ayudas como la de Filomena, y no tener ni medio proyecto propio de calado para ciudad", dijo. "Ávila ha perdido el tiempo con Por Ávila y este alcalde", insistió Sánchez-Reyes, quien volvió a hacer referencia a los siete liberados del equipo de gobierno y al sueldo del alcalde en contraposición a "su incapacidad para bajar impuestos a los ciudadanos", lo que a su juicio "se necesita en estos momentos".

El concejal Mario Ayuso también tomó la palabra para recordar las tres enmiendas aceptadas (bonificaciones en el IBI y el Impuesto de Actividades Económicas), que "no son suficientes para dar el apoyo a un proyecto que adolece de lo que el PP pretende conseguir, la bajada de impuestos para ayudar a familias y empresas a hacer frente a la inflación" y la "dinamización económica". Además, aprovechó para recordar las enmiendas que se han quedado en el camino, como la bajada del IBI a niveles de 2019, la bajada en las tasas de agua y basura, la supresión de la tasa de préstamo de material municipal o la reducicón en las tasas de las escuelas municipales. 

La falta de escucha a la ciudadanía, con el ejemplo del rechazo de las enmiendas de la FAVA, fue otro de los reproches del PP, así como "las formas" y el fondo en el proceso de negociación del proyecto.