Que todas las personas, también aquellas que padecen una discapacidad a causa de una enfermedad mental, puedan desarrollar su proyecto de vida con la mayor autonomía posible. Ésa es la principal premisa bajo la que, a diario, trabaja Faema Salud Mental. 

Encontrar un empleo, salir con los amigos, hacer la compra... Y también ser independientes, por qué no. Todo esto resulta de vital importancia para los usuarios de la entidad abulense, que anuncia a Diario de Ávila que antes de que acabe el año pondrá en funcionamiento dos nuevas viviendas supervisadas: una de manera más inmediata, el próximo mes de octubre, y otra, antes de que acabe el año. Todo ello, con una inversión de 400.000 euros.

Se trata de casas en las que sus usuarios desarrollan como decíamos su proyecto de vida con el apoyo de un equipo multidisciplinar que se adapta a las necesidades, intereses y expectativas de cada persona, con una atención de 24 horas diarias los 365 días del año.

Con la apertura de estas dos nuevas viviendas, en las que en la actualidad se dan los últimos retoques en los trabajos de acondicionamiento,Faema contará con 17 viviendas supervisadas, en las que vivirán 77 personas.

«Faema puso en marcha la primera vivienda supervisada en el 2005, donde comenzaron a vivir seis personas con discapacidad por enfermedad mental, y actualmente tiene en funcionamiento 15 en las que están viviendo 67 personas en edades comprendidas entre 19 y 74 años de los cuales son 50 hombres y 17 mujeres», nos aporta los primeros datos Inmaculada Pose, directora gerente de Faema.

Según apunta, al menos 44 de ellas proceden del medio rural, «siendo un 65,7 por ciento de pequeños pueblos, donde les resultaba difícil vivir por no existir recursos especializados que puedan favorecer su recuperación».

un plan de vida. De ahí la importancia de un servicio en el que, recalca Pose, sus usuarios «deciden su plan de vida».De esta manera, unas optar por asistir al Centro de Día, otras tener un asistente personal y otras, trabajar. «Desde Faema les apoyamos a perseguir sus sueños», presume del trabajo de todo el equipo la principal responsable de Faema, que aclara que «todas las viviendas que tiene Faema son en propiedad salvo una que fue cedida por el Ayuntamiento de Ávila en el 2009».

«En el 2022 Faema ha efectuado la compra de dos nuevas viviendas que han necesitado reforma y equipamiento donde podrán vivir diez personas más, por lo que se pasará a tener 77 plazas disponibles para toda la provincia de Ávila», abunda Pose en los datos de las nuevas viviendas.

«Las viviendas supervisadas son un recurso muy demandado porque es un servicio que fomenta la vida independiente y la autonomía personal», reflexiona para Diario de Ávila. En este sentido, informa de que en la actualidad hay una lista de espera de 20 personas, con lo que gracias a la apertura de las nuevas viviendas se cubrirá, al menos, el 50 por ciento de esa demanda.

«Desde Faema lamentamos no poder atender a todas las personas que nos demandan este servicio, pero estamos en un momento donde también tenemos en marcha nuevos proyectos de construcción como es la residencia para mayores y otra para personas con discapacidad y reorganizaremos a las personas en función de la intensidad de apoyos requeridos con lo cual en cuanto se abran estos nuevos servicios quedarán plazas disponibles», explica Pose.