La Diputación de Ávila sigue cerrando el círculo en lo que respecta a «un servicio tan importante como es extinción de incendios», decía su presidente Carlos García y es que éste es uno de los compromisos más firmes de la legislatura y «para con el medio rural. Y, sobre todo con aquello que tiene que ver con las emergencias y con salvaguardar la vida de los abulenses». En este sentido uno de los 'gestos' que tuvo lugar este jueves fue la entrega de cinco motobombas a otras tantas agrupaciones de Protección Civil, que son las de Cebreros, El Tiemblo, Arenas De San Pedro, Candeleda y Navaluenga. 

La inversión ha sido de 35.000 euros, recordaba García, acompañado por el diputado de Consorcios, José Luis del Nogal y del  responsable de la Agrupación de Apoyo y Rescate Provincial (ARPA), Óscar Arribas, encargado de la formación de los voluntarios a los que se hizo entrega del material. A ambos agradecía el presidente su esfuerzo. Hablábamos de cerrar el círculo puesto que Diputación está inmersa en la materialización de los parques comarcales de bomberos. De hecho anunciaba Carlos García que el de Arenas (que se ubicará en Ramacastañas) está a punto de iniciar las obras «lo hará en dos o tres semanas» y «para que estén acabadas cuanto antes». Y  como el de Arenas, el de Arévalo «que se adjudicará la próxima semana», al igual que la apertura y adjudicación definitiva del de Sotillo. Resta Piedrahíta que «está en proceso de adjudicación» y, «a falta de unos pequeños flecos administrativos, está el de Cebreros que también en unas semanas saldrá a contratación».

En cuanto a las motobombas, que tienen una capacidad de 600 litros, su destino principal es el camión de intervención rápida con el que cuentan ya varias de las agrupaciones de Protección Civil y es que resta dotar a cinco y eso se va a hacer en el mes de junio, decía Carlos García. Esta herramienta, explicaba Óscar Arribas, permitirá afrontar incendios tanto forestales como interurbanos y «son muy útiles sobre todo en los primeros momentos del fuego»; además «como las calles en los pueblos a veces son más estrechas de lo normal y no caben los vehículos grandes, pues estos equipos pueden hacer de lanzadera». Hasta 24 bares de presión se pueden alcanzar (conectado a hidrantes), con un caudal máximo de 560 litros por minuto.

En cualquier caso para el presidente de la Diputación la entrega de este material es una muestra más del compromiso «inequívoco» con el salvamento y «ante las emergencias que tanto daño han hecho durante estos años, sobre todo los incendios, las nevadas o las ríadas». Es la mejor manera de hacer provincia, defendía.