Concluye el encuentro de obispos, vicarios y arciprestes

I.C.J.
-

"Fraternidad, sinodalidad y camino en comunión" han guiado esta cita de la Iglesia de Castilla celebrada durante dos días en el Seminario Diocesano de Ávila

Concluye el encuentro de obispos, vicarios y arciprestes

Durante dos jornadas el Seminario Diocesano de Ávila ha sido la sede del Encuentro de Obispos, Vicarios y Arciprestes de Iglesia en Castilla. En torno a un centenar de participantes se han dado cita en la ciudad amurallada, en lo que ha supuesto el primero de los encuentros presenciales desde que comenzó la pandemia. Y esto se ha traducido, tal y como se recoge en una nota de prensa enviada al efecto «en reencuentros llenos de abrazos. Pero, sobre todo, en dejar patente las ganas de reavivar ese camino común emprendido desde hace 40 años entre las diócesis de Zamora, Salamanca, Ciudad Rodrigo, Ávila, Valladolid, Segovia, Palencia, Burgos y Osma-Soria».

Como ya se anunció, el Sínodo centró todas las sesiones de trabajo. Y es que «este encuentro ha supuesto una suerte de 'fase regional' (por así decirlo) del proceso sinodal en el que está inmersa la Iglesia en este momento. De hecho, uno de los puntos fuertes de estas dos jornadas ha sido la presentación de las conclusiones a las que han llegado las distintas diócesis en la primera fase del Sínodo». 

El encuentro se inició con una Lectio Divina (dirigida por el Obispo de Zamora), y tras haber reflexionado sobre lo que es y supone el discernimiento comunitario (gracias a la ponencia del jesuita Luis María García Domínguez), era el momento perfecto para reconocer nuestra realidad en aras a seguir caminando en sinodalidad», explican en la nota de prensa. Así, en la primera jornada ya se mostraron «las inquietudes, preocupaciones y anhelos de toda la Iglesia en Castilla en el momento actual». 

Durante las dos jornadas se ha notado que «subyace una melodía común en estas síntesis de todas las diócesis: no somos demasiado distintos en estas Iglesias de Castilla, aunque también se perciben los matices especiales de las diversas diócesis con sus características peculiares y sus historias recientes».

Esta «síntesis de las síntesis diocesanas» ha dejado la puerta abierta para, a partir de este Encuentro de Ávila, «seguir caminando en sinodalidad como región». Un documento sobre el que se trabajó por grupos durante la jornada del martes, para plasmar de forma más concreta ese rumbo al que se dirigen nuestras Iglesias particulares, con el doble acento de «la animación a los pastores y el crecimiento de la participación de los laicos y la vida consagrada en la comunión y misión de la Iglesia». 

Oración y visitas. El Encuentro lógicamente ha tenido «momentos de oración y de fraternidad. Como el rezo de Vísperas con el que concluía la jornada del lunes y que se realizó en el Monasterio de la Encarnación». Un lugar idóneo teniendo en cuenta que allí Santa Teresa de Jesús pasó la mayor parte de su vida, y templo jubilar en este Año Santo Teresiano que se está viviendo en la diócesis de Ávila. 

También la eucaristía conjunta en la capilla del Seminario, con la que concluía a media tarde del martes el Encuentro, y que ha estado presidida por el Cardenal Ricardo Blázquez, arzobispo emérito de Valladolid.

 Asimismo, los participantes tuvieron la oportunidad de conocer dos joyas del románico abulense en una visita que tuvo lugar en la noche del lunes: la basílica de San Vicente, y la iglesia de San Andrés.