La Organización Nacional de Ciegos Españoles de Ávila, con la colaboración del Ayuntamiento de la capital a través del Consejo Municipal de Personas con Discapacidad, organizó el pasado sábado una actividad con la que, bajo el título 'Hacer vidente lo evidente', quiso solicitar al conjunto de la sociedad el apoyo para conseguir "una mayor estimulación sensorial dejando a un lado lo que percibimos con la visión", además de reivindicar "la necesidad de un etiquetado accesible".

La primera parte de esta iniciativa, que contó con la participación de medio centenar de afiliados a la ONCE, se desarrolló en la forma de una visita guiada a cargo de un guía oficial que contó a los participantes, de forma totalmente accesible para todos ellos, alguno de los secretos mejor guardados de la ciudad medieval.

Posteriormente, los asistentes disfrutaron de una cata de vinos, conservas y otros productos gastronómicos que compartían la cualidad de que todos ellos cuentan actualmente con etiquetado braille, una medida de accesibilidad que al igual que otras, como por ejemplo la implantación de un código QR, desde la ONCE aseguran que "es clave para las personas ciegas o con discapacidad visual grave", tanto que manifiestan que es "imprescindible" para su colectivo.

La cata corrió a cargo de la sumiller Mercedes González, que cuenta con una asesoría gastronómica y ocupa, entre otros puestos, el de embajadora de Champagne en España.

Además, el acto estuvo respaldado por Rafael Mancebo, presidente de la DOP Cebreros, responsables de la hostelería abulense y otros profesionales del sector de la gastronomía, que con su presencia se sumaron explícitamente a la petición de un etiquetado inclusivo y accesible para todos.