El Burgos Promesas se hizo grande en casa y superó al Real Ávila en un partido muy igualado en el que los visitantes hicieron méritos para poder haber puntuado en Castañares. Tras una primera mitad en la que los visitantes llevaron la voz cantante llegó el único tanto del choque en la segunda. Un solitario gol de Heras desde los once metros acabó con las esperanzas de un cuadro visitante que desperdició varias oportunidades de gol en los 20 minutos que restaban para que el colegiado Blanco Núñez señalara el final del partido. Una derrota que supone el punto y final a una semana francamente nefasta para los de José Manuel Jimeno con un partido aplazado ante el Almazán, el empate en el duelo ante el Bupolsa y ahora la derrota con el Burgos Promesas. Un punto de seis disputados, demasiado poco para un equipo que quiere meterse en la pugna por el ascenso y que no sólo ve acercarse a sus rivales por el retrovisor sino a sus futuros seguir sumando en el Grupo A.

El partido empezó con mucho ritmo. El Real Ávila fue superior en los primeros compases del choque, los chicos de José Manuel Jimeno querían comenzar metiendo el miedo en el cuerpo a un Burgos Promesas que apostó por un bloque bajo y tanteó al rival con una estrategia algo más defensiva, cerrando espacios a un equipo encarnado que suele sufrir sin ellos. La escuadra encarnada gozó de varias ocasiones pero los disparos de los atacantes no terminaron de ser precisos y no lograban batir a un Gorka que cuajó una actuación más que destacada, siendo una pieza clave para los suyos.

Tras las primeras ocasiones del Real Ávila, el Burgos Promesas despertó y aviso con un disparo desde media distancia que paró Brian haciendo una estirada espectacular, evitando lo que podía haber sido el 1-0. Demostraban los hombres de Carlos Aguilera que pese a optar por una táctica algo más conservadora podían hacer daño en acciones rápidas.

La primera mitad terminó con el Burgos Promesas sacudiéndose el dominio del Real Ávila y bajando las pulsaciones a un partido que fue de más a menos en lo que a ocasiones de gol se refiere.

En la segunda parte el Real Ávila trató de salir a por todas, haciéndose con la posesión del cuero y volviendo a amenazar la portería del Burgos Promesas. Además la entrada de Marcelo, Cristian y Manu Moreira dejaba claras las intenciones del técnico madrileño, que quería la victoria.

En el minuto 71 llegaba la jugada polémica.  El colegiado decidió señalar penalti favorable al cuadro local en una acción muy protestada por los jugadores del Real Ávila. Ignacio Heras fue el encargado de transformarlo y puso por delante (1-0) a los burgaleses. El Real Ávila intentó reaccionar al gol de Heras y fue a por el empate, gozando de algunas oportunidades para forzar las tablas pero no fueron capaces de conseguirlo. Finalmente el Burgos Promesas se supo defender y cerraron la meta de Gorka para evitar cualquier susto, haciendo que los tres puntos se quedasen en Burgos.