SI Ávila y Madrigal de las Altas Torres ya estaban unidas con el estado de Michoacán por los hermanamientos materializados en torno al humanista Vasco de Quiroga, desde este miércoles lo están un poco más. La música y la historia contribuyeron al refuerzo de esos lazos en el transcurso de la que fue la jornada central de la estancia en la provincia de Ávila de la delegación de Michoacán. Un viaje que llegó tras la reciente expediente abulense y con motivo del concierto de clausura del 55 Festival Internacional de Órgano de Morelia que se organizaba en Madrigal, la cuna de la Reina Isabel la Católica y también del Tata Vasco, la figura que hace de puente entre sus dos 'patrias', a uno y otro lado del océano Atlántico. 

Precisamente este recital de órgano, la guinda a un festival que es considerado como uno de los más importantes de América, fue el acto más esperado del día para Madrigal y para Michoacán. Un concierto con lo mejor de los dos sonidos que sirvió para poner de relieve la importancia del intercambio cultural y para honrar a un morañego universal que se hizo querer en el corazón de México por su calidad humana. 

Las palabras de las autoridades (asistieron el obispo y el presidente  de la Diputación) y la entrega de obsequios pusieron el broche de oro a una intensa agenda que todavía tiene continuidad este jueves y que por la mañana ya había vivido otro hito importante, la inauguración del centro de interpretación 'kilómetro cero. Ruta de Don Vasco'. La alcaldesa de Madrigal de las Altas Torres, Ana Isabel Zurdo, fue la anfitriona en un acto en el que también participaron los alcaldes de Pátzcuaro  yQuiroga y del que salió un propósito común, seguir trabajando de la mano para reforzar el hermanamiento a través de la cultura y la historia y seguir manteniendo vivo el legado y los valores del humanista.

Antes de cortar la cinta de este flamante centro de interpretación, Ana Zurdo había hablado de una fructífera visita para seguir profundizando en lo mucho que une a Madrigal y a Michoacán. «Se ha recuperado un espacio muy importante, que era la antigua panera de diezmos de la iglesia de Santa María del Castillo, y se ha colocado una pantalla gigante que será como una pantalla abierta al mundo y ocho paneles explicativos sobre la vida y la obra de Vasco de Quiroga». El nombre, Kilómetro cero, se debe a que a partir de ahora será «el inicio de la ruta de Don Vasco que existe en México», al igual que Madrigal fue el 'kilómetro cero' de la vida del Tata Vasco y ahora es «una pequeña prolongación de Michoacán». De esta manera «se cierra el círculo», subrayó la alcaldesa, quien destacó que la unión entre los dos mundos «cada vez es más firme» y abogó por que la figura de Tata Vasco se reconozca y se valore más en su tierra natal. «Somos la prueba viviente de que Tata Vasco está vivo y ese es el objetivo de esta ruta compartida, que todos entiendan por qué él vive en México y por qué debería renacer en España», dijo.

El alcalde de Pátzcuaro, Julio Arreola, no ocultó su emoción y, tras destacar los méritos del primer obispo de Michoacán, se comprometió a «darle vigencia» a la unión, después de que su padre fuera el artífice de un primer hermanamiento hace 39 años, y también a mejorar la calle que lleva el nombre de Madrigal en la localidad mexicana. El alcalde de Quiroga, Arturo Estrada, también resaltó cómo cambiaron las cosas en su localidad gracias al humanista castellano y se comprometió a trabajar bajo el legado, los valores y «la calidad humana» de Vasco de Quiroga y de la mano de sus hermanos en España.