La contaminación obliga a llevar agua embotellada a 24 pueblos

I.Camarero Jiménez
-

Esta cifra significa que uno de cada diez pueblos tiene nitratos, hierro, cloro o arsénico en el agua

La contaminación obliga a llevar agua embotellada a 24 pueblos

Esta semana en una información publicada por la agencia Ical, Ecologistas en Acción, aseguraba que Castilla y León es la Comunidad con más poblaciones afectadas por la contaminación de su agua potable por nitratos. Cuantificaba en 63 los municipios afectados y respecto a Ávila apuntaba a que eran 13 en total.

En este sentido hemos preguntado a la Diputación de Ávila por este asunto y por la dispensación de agua embotellada que hacen a los ayuntamientos afectados por este contaminante y por otros como son el arsénico, el cloro y el hierro.Así desde la institución provincial han respondido que en la actualidad, en esta semana son 23 los consistorios que tras solicitarlo están siendo abastecidos con agua embotellada. Son los siguientes: en el caso de los nitratos habría  presencia de nitratos en Berrocalejo de Aragona, El Bohodón, Cabezas de Alambre, Constanzana y Jaraizes, Donvidas, Mamblas y San Vicente de Arévalo y Villanueva de Gómez (que también sufre contaminación por cloro además de por nitratos). A ellos hay que sumar  otros 14 que son aquellos que se ven afectados por el arsénico y ése es el caso de Adanero, Bercial y Bernuy de Zapardiel, Blascomillán y Blascosancho, El Mirón, Guareña (La Torre), Maello (en donde además de arsénico se ha detectado la presencia de hierro), Pedro Rodríguez, Rasueros y Salobral, Sinlabajos, Velayos y Villar de Corneja. Un municipio más se une a esta lista, Tiñosillos en donde se ha detectado 'Alaclor'.

En definitiva si nos es por arsénico, es por nitratos, por hierro, por cloro o por otros contaminantes todos estos municipios constan en el listado de los que tienen que ser suministrados con agua embotellada. Hay que incidir en el hecho de que son los propios ayuntamientos los que deben solicitarlo. Y es que recuerda la Diputación que «el control de los contaminantes del agua para consumo humano es competencia de cada ayuntamiento, que tiene la obligación de medir los niveles  de cada sustancia y publicarlos en una web oficial. La Diputación lo que hace es ofrecer el servicio de abastecimiento que debe solicitar el Consistorio. La institución provincial lo distribuye y subvenciona el 80% del coste; mientras que el 20% le corresponde al Ayuntamiento.

197 municipios en España. Retomando la denuncia de Ecologistas en Acción recuerdan que a nivel nacional en al menos 197 municipios españoles, que suman más de un millón de habitantes, el agua de abastecimiento contiene unos niveles de nitratos iguales o superiores a 50 miligramos por litro, lo que provoca que no sea apta para el consumo humano, de acuerdo con lo indicado por la Organización Mundial de la Salud y por la normativa vigente.

Según el informe 'Estudio del contenido en nitratos de las aguas de consumo humano', elaborado por la organización ecologista y referido al año 2021, esta situación de contaminación afecta  en la región especialmente a Ávila y Soria, con 13 municipios en ambas provincias, seguida de Valladolid con once y Segovia, con nueve. También destacan Salamanca con siete; y en último lugar, Burgos y Palencia, con tres y León y Zamora, con dos cada una.

En su opinión, esta contaminación de las aguas tiene su origen «en la proliferación de macrogranjas intensivas y al uso masivo de abonos nitrogenados en la agricultura, especialmente en el regadío, que además no para de crecer, de manera legal e ilegal». Se trata de una contaminación especialmente grave, ya que en las aguas subterráneas pasa a ser prácticamente irreversible.

Por todo ello, Ecologistas en Acción ha solicitado al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que, como responsables de la gestión del agua en España, adopten las medidas necesarias para corregir la actual situación, que pasan necesariamente por frenar la implantación de nuevas explotaciones ganaderas intensivas, así como la expansión del regadío, limitando también el uso de abonos nitrogenados en los regadíos existentes.

La organización ecologista señala que se trata de un problema ambiental y social muy importante, por lo que tiene previsto para 2023 medir el nivel de nitratos en las aguas de numerosos municipios de todo el Estado español, con la idea de denunciar ante las administraciones responsables, la Fiscalía y la opinión pública aquellos casos en los que se superen los niveles de nitratos permitidos.