El director de la Institución Gran Duque de Alba (IGDA), Maximiliano Fernández, y el diputado provincial responsable del área de Cultura, Eduardo Duque, presentaron este viernes las 25 becas de estudio e investigación que la institución tiene previsto repartir este 2020.

Con un presupuesto total de 85.000 euros, la IGDA se plantea un reto: «convertir esas inversiones en contribuciones al desarrollo y al conocimiento de la provincia de Ávila», apuntó Fernández, que en sus palabras quiso destacar cómo la institución se encuentra dando pasos para, sin dejar de lado sus tradicionales estudios históricos, fomentar las investigaciones de carácter más práctico para, así «hacer investigación aplicada».

«Queremos contribuir a a los retos de la provincia», mencionó Fernández sobre aspectos como el desarrollo rural, el incremento de la población o el futuro de la bienestar.  

La evolución del estado de los ríos de la provincia, su potencial geotérmico, las ermitas rurales y su relación con las fiestas populares, la prevención de los ataques de lobos, el turismo... son algunos de los aspectos que serán tenidos en cuenta por los investigadores becados este 2020. Unos investigadores entre los que se encontrará el que lleve a cabo el estudio de la figura de la periodista arenense Josefina Carabias, «una de las mujeres pioneras en el periodismo español» y que será estudiada a petición de la Asociación de la Prensa de Ávila.

Las 25 becas, tal y como explicó por su parte el diputado de Cultural se dividen en tres modalidades.

La primera de ellas es la dedicada a los estudios universitarios. Para estas diez becas la IGDA ha reservado del presupuesto aportado por la Diputación Provincial 30.000 euros, por lo que cada una de ellas estará dotada con 3.000 euros.

Para optar a las mismas tan sólo es necesario cursar estudios universitarios en algún centro abulense y estar empadronado en alguna localidad de la provincia.

El año pasado, los diez estudiantes becados se dividieron en seis mujeres y cuatro hombres que estudiaban en la UCAV, la USAL y la Escuela de Artes y Oficios. Cuatro de ellos cursaron estudios de Enfermería, otros cuatro, de Educación, uno estudiaba Derecho y un décimo hacía lo propio con Conservación y Restauración. Su procedencia se repartía de la siguiente manera: tres de ellos eran de Arévalo; dos, de las Navas del Marqués; y el resto provenía de El Arenal, El Hornillo, Muñogalindo, Serranillos yRiocabado.

«Con estas becas damos cobertura a las familias de los mejores estudiantes abulenses», apuntó Duque.

La segunda modalidad de becas es la enfocada al régimen general de investigadores. En este caso el presupuesto cuenta con 40.000 euros repartidos en diez becas, lo que se traduce en una dotación de 4.000 euros cada una.

El año pasado, cuando la cifra de becas se amplió con dos más, estas se centraron en materias como la Geología (en dos casos), Filología, Biología, Hidrología, Ciencias Sociales, Historia, Ciencias de la Salud y Turismo.

Y la tercera de las becas, la dedicada a los jóvenes investigadores y creada en 2019, cuenta con un presupuesto de 15.000 euros para cinco becas. Es decir, cada una de ellas está dotada con 3.000 euros.

El año pasado, estos jóvenes investigadores enfocaron sus trabajos al Turismo (con dos becas), la Filología y la Literatura, el Derecho y la Arqueología.