Los datos del Observatorio del Sistema de Salud correspondientes al tercer trimestre del año vuelven a indicar la diferencia en la presión asistencia entre los centros de salud de la capital y la provincia. Como media, cada médico de familia de Ávila tiene asignados 748 pacientes pero esta media se eleva hasta 1.140 cuando se trata de los centros de salud que están en el ámbito urbano y se queda en 547 en las zonas rurales, con todas las diferencias que supone desarrollar aquí la labor.

Todos los centros de salud que atienden a la población de la capital tienen a su médicos con más de 1.000 tarjetas sanitarias asignadas. El que más, el centro de salud Ávila Sureste, con una media que se acera a las 1.500 para cada uno de sus nueve profesionales. En el resto de centros, hay 1.342 en el Ávila Estación, 1.285 en el Sur Oeste y 1.263 en el Estación.

En el caso del ámbito rural hay más diferencias entre unos centros y otros, pero en ninguno se pasa de las 1.000 tarjetas. Las cifras más altas están en Arenas de San Pedro, Burgohondo, Candeleda y Navarredonda, todos ellos entre las 800 y las 900 tarjetas sanitarias por profesional. La situación contraria se vive en Muñico, con 295 pacientes por médico.

En Ávila se cerró el tercer trimestre del año con 177 médicos, lo que supone una reducción de nueve de estos profesionales respecto a las cifras que había un año antes. De ellos, 117 trabajan en el ámbito rural y 60 en el urbano.

 A pesar de los datos de las tarjetas, a veces no se corresponden con la presión que soportan los profesionales. Es cierto que sí hay esa correspondencia en el centro de salud Ávila Sureste, que es donde más presión tienen los médicos, ya que atienden una media de 46,2 pacientes al día, en una cifra que sube mínimamente desde el trimestre anterior (45,5) pero baja respecto al primero, cuando llegaba a las 48 consultas diarias.

El Ávila Norte es el siguiente centro de salud con más presión, con 41,4, pero hay que destacar el caso de Las Navas del Marqués, donde sus seis médicos, a pesar de tener una media de 836 tarjetas, soportan una presión de 40 consultas diarias.

En general, la media de consultas, teniendo en cuenta que en muchas zonas rurales se tira hacia abajo, está en 29,6 consultas diarias por médico, más o menos en la media de un año atrás, siendo 37,6 de media en el ámbito urbano y 25,8 en el rural. Donde menos presión hay es en Navarredonda de Gredos y Muñico.

Con esa media de 29,6 consultas al día, Ávila no destaca ni por ser la mejor ni la peor provincia de Castilla y León en cuanto a la presión asistencial. Hay más presión en Burgos, León, El Bierzo, Palencia y las dos zonas de Valladolid, pero hay menos en Salamanca, Segovia, Soria o Zamora.

En cuanto al resto de profesionales, las enfermeras tienen asignadas una media de 836 tarjetas sanitarias cada una, una cifra más alta de pacientes que en el caso de los médicos. Vuelve a suceder lo mismo que en el caso anterior y hay más tarjetas en el ámbito urbano, con una media de 1.124 y baja en el rural, con 649. Con 178 de esta profesionales trabajando, hay centros como el Ávila Sureste y el Suroeste donde se superan las 1.300 tarjetas por enfermera y otros como el de Muñico, que se quedan en 230.

Sin embargo, la presión asistencial es más baja que en los médicos, con una media de 17,2 consultas al día, en una cifra que aumenta desde los datos del pasado año, cuando no se llegaba a las 15. La mayor presión está en Candeleda y Cebreros, con cerca de 23 consultas diarias, y la más baja, en Navarredonda.

En pediatría la media está en 24 consultas diarias, en una cifra que baja respecto a los trimestres anteriores.

número de tarjetas. Es significativo que Ávila cerró el tercer trimestre con 148.805 tarjetas sanitarias, en lo que supone un descenso respecto al año anterior, cuando se superaban las 149.000.

Por centros de salud, el que más tarjetas asignadas tiene es el Ávila Estación, superando las 17.000 mientras que en Muñico están con 919 pacientes.

En el caso de pediatría hay 16.426 niños con tarjeta, unas 300 menos que un año atrás y estando la cifra más alta en el Ávila Sureste, con cerca de 3.000 menores de 14 años.