El Consejo Económico y Social de Castilla y León apremia al Ejecutivo regional a que apruebe urgentemente el mapa de transportes autonómico, que propone ampliar a 1772 las actuales 857 rutas y acumula ya un retraso de tres años, para asegurar la estabilidad de los contratos de gestión. Para ello, apuesta por la accesibilidad universal del transporte regular de viajeros por carretera, que considera deficitaria, y por el impulso de las rutas de transporte a la demanda y la especial atención en el medio rural. Así lo recoge en las conclusiones del informe previo sobre el proyecto que entró en el CES el pasado 23 de marzo, sin que tuviera un carácter de urgencia. Entre los criterios de planificación de este mapa, como regla general, con carácter vinculante, figuran el sistema de prestación, condiciones de explotación y requisitos básicos que han de cumplir los servicios, el sistema económico financiero de los servicios, el sistema tarifario o la programación de las futuras licitaciones de los contratos de concesión de servicio.

Como primera recomendación, el CES estima «necesaria la pronta» aprobación del mapa de transportes para garantizar la estabilidad de los contratos de gestión de servicios públicos en este ámbito, además de ajustar el desfase del marco normativo para aprovechar las oportunidades de financiación que pueden ofrecer los nuevos fondos europeos. Así, recuerda que el actual régimen concesional finalizaba el 2 de diciembre de 2019, pero la ley de transporte estimó la entrada en vigor del nuevo un año después de la aprobación de esta norma, que data del 3 de julio de 2019, es decir que lleva casi tres años de retraso. 

Además, subraya que la implantación del mapa de ordenación de transporte deberá ir acompañada de la mejora de la calidad del servicio y modernización y seguridad de la flota, que debe estar compuesta por vehículos modernos, eficientes y adaptados, en los que se implanten los principales avances inteligentes de transporte y seguridad.

La institución dirigida por Enrique Cabero destaca en este sentido la importancia de continuar mejorando la accesibilidad universal del transporte regular de viajeros por carretera, cuyo nivel en la actualidad continúa siendo deficitario. «Esta mejora resulta necesaria, tanto en los vehículos como en las terminales», señala el texto que, por otra parte, considera adecuado el impulso de las rutas de transporte a la demanda, tanto por lo que suponen de adaptación del servicio a las necesidades de los usuarios de la Comunidad, como por lo que contribuyen a la sostenibilidad ambiental y a reducir la huella de carbono, al minorar el número de kilómetros recorridos. Igualmente, ve necesario que, en materia de movilidad, las políticas que se aborden estén integradas con las políticas ambientales.