Octubre no ha sido un buen mes para el turismo rural en los establecimientos abulenses comparado con el mismo mes del año anterior. Las 24.143 pernoctaciones registradas por los 9.324 viajeros suponen un importante paso atrás respecto a 12 meses antes. En total son un 16,4% menos las estancias (-4.733) y un 21,5% menos los visitantes que nos llegaron (-2.549). Y eso que hemos multiplicado por cinco las pernoctaciones extranjeras que pasan de 271 a 1.325 pero, claro, perdemos cerca de 5.800 del turista nacional así que así es difícil afrontar la situación.
Hay que decir que es algo que a nivel general ha ocurrido también en Castilla y León donde efectivamente se mantiene el liderazgo en este tipo de turismo en España, pero también se pierde casi un 16% de las pernoctaciones.
Destacar que en el acumulado de los diez meses que hasta ahora tiene contabilizado el Instituto Nacional de Estadística (INE) también es cierto que la provincia abulense va mejor que durante el mismo periodo de 2021 sumando nada menos que 37.148 viajeros y 63.227 pernoctaciones, un 53% más y un 28,5% más hasta llegar a un total de 284.919 noches protagonizadas por 106.799 visitantes. Evidentemente hay que tener en cuenta que el 2021 vivió duramente la 'resaca' de un 2020 marcado por la crisis sanitaria.
Por eso lo comparamos también con el 2019 y en ese sentido 2022 nos da una de cal y otra de arena porque perdemos más de 3.400 viajeros respecto a entonces (un 3,1% de retroceso) y sin embargo mejoramos en 7.608 las pernoctaciones registradas hace tres años y antes de que llegara la pandemia. El incremento es del 2,7% respecto a entonces. Algo también muy significativo.
Un inciso para hablar del turismo extranjero que ha crecido bastante en el mes de octubre pero que, sin embargo, sigue siendo muy minoritario. Las cifras son mejores que en 2021 cuando a nivel general suponía menos del 2% de los viajeros y un 2,5% de las pernoctaciones. A ese respecto crecemos hasta el 2,5 y el 3,5%. Ahora bien antes de la covid en 2019 los viajeros rondaban el 4% y las estancias el 5% así que hay camino por recorrer en este sentido.
Vamos con el dato más favorable del mes de octubre y ése a tenor de los datos del INE pasa por el empleo porque son 947 los trabajadores en este 2022 cuando en octubre del 2021 no llegaban a 900 (892 concretamente) y en 2019 pasaban por muy poco los 900 (906 para ser exactos).
Dicho esto, más noticias negativas. Los establecimientos abiertos en octubre de 2022 y las plazas de turismo rural son menos que hace un año y que hace tres. 716 tenemos según las últimas cifras del INE con 5.606 plazas; en 2021 eran 722 y 5.686 plazas y en 2019, 756 y más de 6.100 plazas. De nuevo, malas noticias.
Tampoco son buenas las que trae el grado de ocupación respecto a 2021. Por plaza tenemos ahora una ocupación de menos del 14%;un año antes, superior al 16%; en fin de semana del 33,5; en 2021, un punto más y por habitaciones hemos pasado de casi el 22% a menos del 17,5%.
Respecto a 2019 las cifras son mejores pero es que hay que tener en cuenta la reducción de la oferta.