Ricardo Guerra Sancho

Desde mi torre mudéjar

Ricardo Guerra Sancho


Fechas culturales de abril

27/04/2022

Son fechas de muchas actividades y de movimiento cultural. El día del libro es un día muy representativo de ello. Dicen los estudios estadísticos que una de las cosas que nos ha dejado la dichosa pandemia es que ha crecido sensiblemente el afán por la lectura, las cifras de ventas y la acogida a tantas presentaciones de libros. 
Estos últimos días se han presentado varios libros. Unos en el salón de la Casa del Concejo, con sus autores, donde también se realizó la tradicional lectura. Otros se presentaron en la primera feria del libro, y otro este fin de semana, puestos instalados por las inclemencias del tiempo, unos en la Plaza del Arrabal, otros en la antigua sala de exposiciones de la Caja, que ha vuelto a la vida cultural, al menos temporalmente, y esperemos que este espacio que tantos acontecimientos y actos culturales acogió, no quede al margen de la vida cultural de la ciudad. En este caso quiero recordar a un joven escritor de nuestra tierra, Iván, que como buen langueño está siguiendo las sendas de otros paisanos suyos y nuestros, tan ilustres en eso de las letras. Yo le auguro y deseo mucho éxito. Ha presentado y firmado su tercer libro de relato.
Una amiga mía me ha mandado virtualmente una rosa y un libro, ella es de Barcelona y sigue sus costumbres. Yo la he agradecido su intención, aunque nuestras costumbres sean otras. Ya le dije, aquí es la fiesta del libro y también de la Comunidad. Y me volví a casa con un libro en la mano, a engrosar los que tengo pendientes, que últimamente estoy enfrascado más en la escritura que en la lectura, con letras grandes en el ordenador, que las cataratas me lo exigen, y en cambio los libros no están hechos a las medidas particulares…
Entre tanto, en un hueco vi unas imágenes televisivas de la fiesta de Villalar. La verdad que el día era desapacible y la poca gente que asistió a la campa a la fiesta de la comunidad, se refugiaba en las carpas allí instaladas. Los locutores bien pertrechados desafiando el viento y el frío… muchos medios para poco que contar… sin poderlo remediar, en esos instantes recordaba mis años de Villalar, de los primeros y unos cuantos, incluso uno en el grupo de autoridades cuando, por delegación de nuestro alcalde asistí en representación. Y en los balcones del ayuntamiento sufrimos las protestas de siempre que arrojaron huevos, de los que me libré por los pelos. Desde luego no era igual verlo desde abajo que desde arriba. Fueron otros tiempos, pero algunas imágenes que la pequeña pantalla me ofrecía, ineludiblemente me trasladaron al pasado vivido en primera persona y una de las causas por las que me descolgué de la fiesta, porque con mi presencia no quise hacer «el caldo gordo» a ciertos radicales con los que ni estaba ni puedo estar de acuerdo. A pesar de la cita con grupos de nuestra música tradicional que allí se producía. Yo buscaba una fiesta cultural… Luego aquello se institucionalizó y gano en comodidades, aunque se siga reclamando más medios para acoger a tanto gentío, pero perdió en espontaneidad y autenticidad.
Otro acto que se produce estos días es la celebración, sencilla en nuestra tierra, pero con grandes resonancias hispanas, es la conmemoración del nacimiento de nuestra gran Reina Isabel, y fue con uno de esos programas «on line», del que no voy a entrar a fondo, que en este diario ya se dio cumplida información sobre él. Otra experiencia enriquecedora que cada vez nos ofrece cosas nuevas de la vida de esta apasionante reina.
También en Langa actuó nuestro grupo de danzas castellanas 'Entre Ríos', que despega en calidad y en entusiasmo, una realidad en la recuperación de nuestro folclore en forma de danza con rondalla.
Y hablando de nuestra cultura tradicional, el acto tan esperado y que no defraudó en absoluto, fue la charla de Joaquín González-Herrero en Villanueva del Aceral sobre 'Agapito Marazuela o el desertar del alma castellana', con el grupo de 'Dulzaineando', un tema que merece mucho más y dejare para otro día. 
Y a ver si es verdad ese refrán que dice: Marzo airoso y abril lluvioso, hacen a mayo florido y hermoso…