Este Real Ávila tiene ADN ganador

A.S.G.
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El Real Ávila vuelve a mostrar su carácter y personalidad en la goleada al Numancia B. Rubiato felicita a los suyos satisfecho por el compromiso de todo el equipo. «Han dado un paso adelante»

Este Real Ávila tiene ADN ganador - Foto: David Castro

El Real Ávila lo recuperó todo en 90 minutos.Las sensaciones, la personalidad, la intensidad, el juego, la energía, el gol, el triunfo... No se le puede pedir más a los chicos de Borja Rubiato, que volvieron a encandilar a un Adolfo Suárez que se marchó satisfecho, como pocas veces había pasado en los últimos años, con lo que vieron de manos de los suyos. No es la primera vez este año, ya no es casualidad. No lo fue cuando el equipo se 'merendó' al Atlético Bembibre, menos ahora cuando 'devoró' a un Numancia B que, pese a las muchas bajas con las que se plantó en el Adolfo Suárez, acabó siendo el invitado perfecto para que el equipo se reconciliara con todo aquello que le había fallado en las últimas tres jornadas, cuando los resultados y los goles le dieron la espalda.

«Los chicos han dado un paso adelante y han demostrado un ejercicio de madurez». No faltaron las palabras merecidas de elogio de Rubiato hacia los suyos, que han asimilado como propia la fórmula que les ha propuesto su entrenador, y hasta hace unos meses compañero de vestuario, para una temporada de transición en la que el equipo, curiosamente, está respondiendo mejor que nunca. Y la fórmula no tiene más misterio que la intensidad, la energía, la personalidad... Parece sencilla y básica, pero no lo es. Quizás por eso cobra aún más valor la imagen del equipo, pasado el minuto 80 y con un 4-0 en el marcado, corriendo en bloque para impedir una contra del equipo rival. Todos, al unísono. «Es el ADN que queremos este año para el Real Ávila y creo que los chicos lo han entendido. Unos días acompañarán los resultados, otros días no». En este equipo corren todos, los titulares y los del banquillo. Se corre y se quiere más. En otros tiempos el equipo hubiera dado un paso atrás con el 1-0. Pero los de Rubiato quisieron dos, tres, cuatro, cinco... No hay mejor calefactor que los goles. Ya asoma el frío del invierno, pero el Ávila parece dispuesto a calentar el ambiente.   

Pero esto sigue. «Ni antes éramos tan malos ni ahora somos tan buenos» recuerda Rubiato. El paladar rápido se acostumbra a lo bueno y el fútbol suele tener las miras muy cortas. La rueda no para y Rubiato sabe de ello. En un año de muchos cambios, el club no se ha marcado obligaciones, pero la realidad es que en el Adolfo Suárez siempre se mira hacia arriba. Metió cinco el Real Ávila y se despacharon de la misma manera el Júpiter Leonesa (5-2) ante La Virgen del Camino o el Guijuelo (5-0) ante elSanta Marta.Lo hizo por la mínima el Mirandés B (1-0) ante el Ciudad Rodrigo, próximo rival de los encarnados, y se mantiene al acecho el Almazán. La pelea en la zona alta está muy comprimida. Queda un mundo, pero por lo pronto los encarnados están en ella.