Faema Salud Mental ha comenzado el año dando un paso más en materia de empleo contratando a ocho personas desempleadas. Lo ha podido hacer gracias a la inyección económica de 61.300 euros dada por la Junta de Castilla y León y que será la que permita la financiación de los costes salariales de las personas contratadas para la prestación de servicios de interés general y social.
El programa 'Empleo que suma, es el marco de la contratación de estas ocho personas: siete asistentes personales y un oficial de administración, de los cuales, por cierto, cinco pertenecen al mundo rural.
Tal y como indica Inmaculada Pose, directora gerente de Faema, los objetivos principales del proyecto pasan por fomentar la autonomía personal de las personas mayores o personas con discapacidad y/o en situación de dependencia, así como el desarrollo de las actividades básicas de la vida diaria en su entorno habitual. «Por otra parte, se crea empleo y se combate la soledad de las personas más vulnerables, ofreciendo actividades grupales y apoyo en el domicilio. También se les asesora en cuanto prestaciones sociales o recursos que puedan necesitar», asegura ésta en el comunicado de prensa remitido a los medios.
Algunas de las actividades se llevan a cabo en el domicilio y otras en pequeños grupos en espacios cedidos por los ayuntamientos participantes.
Se están realizando talleres de terapia cognitiva, actividad física y deporte, paseos, taller de nuevas tecnologías a través de la Tablet, musicoterapia, taller de hábitos saludables, manualidades, entre otras.
Este programa ha comenzado en diciembre del 2021 y durará hasta mayo del 2022 lo que permitirá dar apoyo a 120 personas.
El proyecto se está realizando en Ávila y en cinco pueblos de la provincia: Burgohondo, Solosancho y sus anejos, La Adrada, Sotalbo y Sotillo de la Adrada.
«Una vez más queda patente la implicación de la Junta de Castilla y León en la implicación con las personas, con el fomento del empleo y con el medio rural» señala Pose, para la que estos proyectos están siendo un gran apoyo para afrontar momentos de soledad que está produciendo la pandemia tanto en personas mayores como en personas con discapacidad.
Además, considera, estas iniciativas son un ejemplo de coordinación entre diferentes administraciones y entidades del tercer sector donde el eje fundamental es la coordinación socio sanitaria.
Por último, desde Faema se valora positivamente cómo la entidad está experimentando un gran crecimiento de servicios y de personas atendidas lo que supone un impulso para el empleo de la ciudad. «Las personas que contratamos a través de estos programas impulsados por la Junta de Castilla y León suelen continuar en la entidad porque somos capaces de fomentar el empleo a través de la atención a las personas», concluye la directora gerente.