Seguro que han escuchado su voz alguna vez. En algún anuncio de la radio o de la televisión.En un documental de RTVE. En su serie preferida. O en alguna película. O puede que en todos esos sitios. Pero les resultaría muy difícil relacionar unos sonidos con otros. Porque la voz de nuestra protagonista de hoy, MaríaVelasco (Salamanca, 1994) es camaleónica. Como la de todos los buenos profesionales del mundo del doblaje y la locución, en el que ella se mueve, pese a su juventud, como pez en el agua.

De haber seguido los pasos de sus padres, hoy estaríamos hablando con una doctora. Pero ella sorprendió a todos cuando encaminó sus pasos hacia el mundo de la interpretación. Así que aquella niña revoltosa terminó matriculada en Cine en la Universidad Camilo José Cela. 

«Me había metido en grupos de teatro y me gustaba», comienza a recordar para Diario de Ávila los orígenes de una pasión que terminó convirtiéndose, con el paso de los años, en profesión.

Fue su familia la que le animó a cursar estudios universitarios. Y aunque no guarda un recuerdo especialmente bueno de su paso por la Camilo José Cela, sí que sabe que fueron unos años muy productivos. «Tocábamos todos los palos», dice, «pero yo hacía todo lo posible por apuntarme a todas las prácticas, a todos los rodajes».

Y fue así como llegó al mundo del doblaje, del que ahora, cuando ya se ha convertido en su manera de ganarse la vida, habla con apasionamiento.

¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila?

Mi infancia y los veranos en casa de mi abuela. 

¿Qué es lo que más le gusta de Ávila?

Es una ciudad donde se respira la calma. En Madrid siempre vas con prisas. 

¿Y lo que menos?

Las pocas oportunidades laborales que hay en Ávila. Muchos jóvenes nos tenemos que ir a trabajar fuera, para poder trabajar en sectores que aquí en Ávila no hay.

Y las comunicaciones. Es una pena que estando tan cerca de Madrid, Valladolid o, Salamanca, con las ventajas que esto podría tener para la ciudad, se convierta en un inconveniente enorme. 

Un lugar de la ciudad para perderse.

Gredos, la montaña… 

Un recuerdo de su infancia.

Mi familia, las reuniones familiares con mis hermanos, tíos, primos. Los veranos todos juntos…. 

Un personaje abulense que le haya marcado.

Por lo cercano de la profesión, mi tío Manuel Ventero. Admiro su trayectoria profesional, su creatividad y su capacidad de reinventarse continuamente.

El mayor cambio que necesita Ávila es…

Necesita modernizarse un poco en cuanto a empleos y facilidades para que la gente más joven no tenga que irse, tanto a estudiar como a trabajar fuera.

También, como he mencionado antes, las comunicaciones  en general.

Avila tiene que creerse que puede estar al mismo nivel que otras ciudades y no depender de ellas para hacer cosas importantes.

¿Y qué tiene que mantener?

La tranquilidad, la seguridad, los precios… Sería un atractivo muy importante para la gente de otras ciudades.

¿Qué le parece la ciudad hoy en día?

Creo que le hace falta despertar, que quiera y la dejen despertar y creerse que puede. 

¿Cómo ve la ciudad en el futuro?

Me encantaría que fuera capaz de aprovechar su situación inmejorable para despertar, como he dicho antes, y hacer cosas grandes. 

¿Qué puede aportar a la ciudad?

En lo mío, en mi profesión, me encantaría hacer Locución y Doblaje de alto nivel, no depender de que nos hagan las cuñas publicitarias fuera, los podcast, y todo tipo de audiocosas. Me encantaría que hubiera estudios de grabación y que Ávila pudiera avanzar más en este sector.

Lea la entrevista completa en la edición impresa de Diario de Ávila.