Es costumbre en prensa, estimados tres lectores, añadir el título con el que encabezo a cualquier escrito que pertenezca más a lo comercial que a lo estrictamente periodístico. Puesto que hoy vengo a hablar de mi libro, como dijo Paco Umbral, así ya van ustedes avisados de antemano, no sea que alguno se me enfade y pierda yo un tercio de mi tropa lectora.
Está abierta desde ayer la Feria del Libro en el Grande. Merece aplauso, pues era necesaria, la renovación de las casetas que por fin tuvo lugar el año pasado, así como el repetir ubicación en la plaza. La Feria celebra el aniversario conjunto mañana, 23 de abril, del fallecimiento de Cervantes y Shakespeare. Quizás hayan transcurrido 406 años desde la muerte del complutense —que parece fue un 22, como hoy, el 23 el entierro—, pero no un número exacto de ellos desde la muerte del inglés. Aunque la fecha sea la misma, los británicos aún no habían cambiado en 1616 su calendario al gregoriano, como era el caso en la católica Europa, y Shakespeare murió 10 días después, el 3 de mayo de nuestro actual almanaque. Por cierto, también falleció hoy el Inca Garcilaso, y nadie parece acordarse de él.
Pero como decía, vengo a hablarles de mi libro. Bueno, mío en un 4%. Porque es el nuevo libro colaborativo —ya van ocho— que en estas fechas alumbra la Asociación de Novelistas La Sombra del Ciprés. El de este año se titula «AV. Confidencial», de temática policial, detectivesca, negra. Son 25 relatos —y un magnífico prólogo— que esta vez homenajean a uno de los géneros más populares entre el público, aunque considerado a veces «menor» por la crítica literaria. Nada más lejos de la realidad, pues habla de las pasiones y motivaciones primarias del hombre, al tiempo que permite diseccionar la sociedad, con sus claroscuros y con toda la maldad que se esconde tras milenarias murallas. Las tramas policiales enmascaran en el fondo la corrupción, consustancial al ser humano, y nuestra ciudad y provincia, en tanto que contenedores de personas, no pueden ser ajenas a ella. Siempre en Ávila: la regla que seguimos a la hora de elaborar estos divertimentos colectivos es que Ávila tiene que ser la protagonista última de los relatos. Y con esa premisa hemos juntado 25 propuestas distintas, 25 voces diferenciadas, 25 estilos y plumas, aunque esperamos haber logrado también cohesión y complementariedad. Desde luego, por falta de ganas y cariño no será.
Sé que el público abulense no se arredrará ante el frío que ha vuelto — antesala segura de un rotundo y fabuloso mayo— y se acercará a la Feria a ojear y comprar novedades en las casetas de todas las buenas librerías abulenses. Les invito también a pasar por la de nuestra Asociación para disfrutar de esta nueva obra, así como de las anteriores; comprándolas colaborarán con nuestras actividades y a la par catarán gran literatura. Y en su caso particular, estimados tres lectores, espero especialmente su visita; si tengo la suerte de estar en la caseta cuando nos visiten, con todo mi cariño les echaré una dedicatoria y una firmita en el ejemplar que se lleven, para agradecerles su minoritario, sí, pero constante y sobre todo siempre selecto apoyo a este humilde remedo de plumilla.