A punto como está de decir adiós junio, ha llegado el momento de empezar a divisar el regreso de las reses trashumantes a la tierra, a sus pastos de Gredos. Este sábado fue el momento clave para acudir al Puerto del Pico para avistar la preciosa e imponente calzada romana y los centenares de reses trashumantes que la atravesaban y que llevan ya días haciendo camino para volver a su hogar. Y es que Gredos aún facilitará alimento ‘natural’ a los animales y cierto aire fresco ahora que llega el calor para dejar atrás las fincas de Castilla La Mancha y Extremadura en las que han permanecido desde finales de 2013.
Cada vez son menos los ganaderos que realizan la trashumancia a la vieja usanza, a pie, colgándose kilómetros a sus espaldas pero el que perviva esta tradición en parte se debe a que haciendo cuentas los costes son menores y el ganado sufre menos que cuando le trasladan en camiones, sin obviar los beneficios medioambientales.
Por otro lado las largas jornadas de caminata siempre son un buen momento para hablar entre los profesionales que vigilan el ganado y que hacen de guías velando además por la seguridad de las reses durante un trayecto no exento de escollos.
Jornada de la Trashumancia en el Puerto del Pico. - Foto: Antonio Bartolomé Para recibirles no fueron pocos los familiares de los ganaderos que se acercaron al Puerto del Pico, punto de encuentro desde hace ya muchos años de los que regresan con los que les están esperando. Además, e invitados por el Consejo Regulador de la IGP Carne de Ávila, la Plataforma Trashumancia Viva y la Asociación Española de Criadores de Raza Avileña Negra Ibérica, allí se dieron cita centenares de curiosos que querían ver la llegada del ganado al tiempo que degustaban productos de la IGP que además está de enhorabuena, pues celebra los 25 años desde que fue distinguida con este sello de calidad y garantía.
Hasta 1.000 raciones de carne guisada, a la parrilla o en hamburguesa (para los más pequeños) se prepararon para la ocasión, por cierto, una de las más concurridas de los últimos años y también de las ediciones más frías.
Y entre el público asistente muchos niños que esperaban ansiosos la llegada de las vacas, además de pertrechados con ropa de abrigo para hacer frente a las ráfagas de aire.
Contemplando la escena y también organizando, entre otros, el secretario de la IGP, Pedro Herraiz, quien aseguraba que la primera vacada que llegó ayer al descansadero fue la de Diego Torres y su familia de Navarredonda de Gredos con alrededor de 400 cabezas y de la que se dio cumplido seguimiento en facebook; tras ellos las reses de Miguel Ángel García de Navadijos, también con otra partida grande de vacas. Y es que en los días anteriores y también durante esta semana irán desfilando por Gredos varios miles de reses, hasta las 3.000 que son aproximadamente las que hacen el camino a pie.El resto, hasta las 18.000 se trasladan en camiones.
Lea la noticia ampliada en la edición impresa