Los 'piques' se resguardan de la lluvia

B.M
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La Procesión de los Romances de Navaluenga, Fiesta de Interés Turístico Regional que aspira a ser Nacional, se quedó en la iglesia pero no perdió su esencia con la rapidez de los versos

De otra manera pero sin perder la tradición. Así se celebró la Procesión de los Romances de Navaluenga, con el famoso 'pique' entre dos grupos de romanceros que recitan los 300 versos en los que Lope de Vega narró la Pasión y Muerte de Cristo. Este año la lluvia impidió realizar la procesión pero los vecinos llenaron la iglesia para asistir, primero a la misa, y después al acto que se realizó en su interior. Los romanceros, la mayoría hombres con traje negro, camisa blanca y luciendo su medalla, y también alguna mujer, se dispusieron en dos grupos para recitar estos versos. Una primera vez, ya a ritmo rápido pero ordenado pero después se hizo una parada para que las mujeres cantaran como lo hubieran hecho en la ermita de la Merced si hubiera salido la procesión, antes de pasar al 'pique' ya con los grupos ganando velocidad a la espera de ver cual era el primero en equivocarse. Aquí decía la tradición que el que erraba tenía que invitar a limonada, pero ahora esta invitación la asume el Ayuntamiento, que estuvo representado por su alcalde, Armando García Cuenca.

Y aunque no hubo procesión, en el templo sí que estuvieron las cuatro imágenes que se suelen llevar, Jesús amarrado a la columna, una talla de Cristo Caído con la Cruz a cuestas, un Cristo crucificado del siglo XVIII y una imagen de La Dolorosa. También en el interior los miembros de Protección Civil se encargan de dirigir a la gente para evitar problemas ante la alta asistencia.

 Saturnino Herráez Gutiérrez, secretario de la hermandad, explicaba que la lluvia «frustró» su intención de salir a las calles del pueblo con la Procesión de los Romances,  los 300 versos de Lope de Vega y el 'pique' en las puertas de la iglesia, teniendo que pasar a interior. Esto supone 'perder' algunos momentos esperados como cuando se canta la despedida en la ermita, que se tuvo que pasar también al templo parroquial.

Los ‘piques’ se resguardan de la lluviaLos ‘piques’ se resguardan de la lluvia - Foto: David CastroEn cuanto al 'pique' en sí, recordó la tradición, que era mantenerse entonando los versos hasta que uno de los dos grupos fallase. Es verdad que antes eran grupos de solteros y casados pero ahora las cosas son distintas. Lo que se hacía era comenzar el 'pique' y en un momento dado se rompía el orden al recitar y se cantaba algún verso intermedio y el otro grupo tenía que contestar con el siguiente. Si no lo hacía, había perdido.

Aunque es verdad que «afortunadamente» han podido mantener la tradición en Navaluenga, lo cierto es que «la juventud no se integra, sobre todo entre 18 y 25 años. Cambia a los 40 y 45 y se van integrando. Desde 1996 que creamos la asociación pasamos en tres años a tener 540 socios efectivos y ahora están en algo más de 300». Pero para ellos, lo importante es «conservar una tradición que está llena de sentimiento».

Y mientras se mantiene, están luchando porque la que es Fiesta de Interés Turístico Regional pase a ser Nacional, apoyados en una procesión que data del siglo XVII. Así lo refrenda también el alcalde, que explica que cree que la celebración ya tiene ese interés nacional, como se refleja en las casas rurales con un «lleno absoluto arrastrados por algo representativo como es la Procesión de los Romances». «Creemos firmemente que es una tradición que está totalmente recuperada y que día a día se va fortaleciendo, sobre todo porque la hermandad ha apostado fuerte», señala.

Habla García Cuenca de «la alegría» que sienten en el pueblo estos días de Semana Santa, en especial con la Procesión de los Romances, aunque fuera en un «día agridulce» por no poder hacer la procesión «para disfrutar de momentos de confraternización».

Es verdad que «todo dentro del templo es diferente», explica, porque no pueden ir por «un circuito maravilloso creado por la Hermandad de Romanceros» y su iniciativa de recuperación de tradiciones. Pero estaban dispuestos a vivirlo de esa manera diferente y así lo hicieron.