La procesión del Via Matris volverá a abrir esta tarde el camino de dolor que se reflejará en cada uno de los actos de Semana Santa hasta la llegada al domingo de Resurrección.
El inicio será reflejo del dolor de una madre que ve cómo su hijo se dirige hacia la muerte, un sentimiento bien visible en el Via Matris, tanto en el desfile procesional como en las lecturas, que recuerdan ese dolor
La Cofradía del Santísimo Cristo de los Afligidos es quien se encarga de organizar esta procesión que parte a las 20,45 horas desde el convento de La Santa. En este mismo templo, antes de comenzar el recorrido, tendrán lugar las dos primeras lecturas antes de abrir las puertas de La Santa para que la comitiva inicie su procesión.
Se cuenta con un solo paso formado por dos imágenes, la del Santísimo Cristo de los Afligidos, una talla que llama mucho la atención por estar inclinada, acompañada por Nuestra Señora de la Paz, en un reflejo de la Madre y el Hijo.
Junto a ellos, los miembros de la Cofradía del Santísimo Cristo de los Afligidos, que tienen la peculiaridad de no llevar capuchones, por lo que procesionan con la cara descubierta, con traje monacal y portando una cruz de madera. Actualmente se cuenta con unos 130 miembros, muchos de los cuales se podrán ver en esta cita del Viernes de Dolores que, aunque tradicionalmente era completamente intramuros, mantendrá un año más su paso por el Rastro, fuera de la Muralla. De ahí se dirigirán a la plaza de Santa Teresa, calle San Segundo, plaza de la Catedral, calle Tomás Luis de Victoria, plaza de Zurraquín y del Mercado Chico, punto en el que se podrán escuchar las lecturas tercera, cuarta, quinta y sexta. Después continuará la procesión por las calles Vallespín, Jimena Blázquez, La Dama, Intendente Aizpuru, plaza de La Santa y vuelta a la iglesia, donde se realiza la séptima lectura y el final del Via Matris.
Esta procesión no tiene sólo el honor de ser la encargada cada año de abrir la Semana Santa, sino que también tiene una peculiaridad que les hace únicos en España, ya que hay internas de Brieva que son hermanas honoríficas, que también salen en procesión.